En declaraciones a los periodistas en el marco de un curso homenaje a Alan Turing, considerado el "padre" de la informática, en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), el investigador ha explicado que "no será necesaria" una modificación de las carreteras y que "ya no se trata de un fenómeno de ciencia ficción".
De hecho, ha explicado que actualmente la empresa norteamericana Google "ya está experimentando" con prototipos de estos vehículos, unas pruebas que han supuesto un cambio de legislación de tráfico en el Estado de Nevada.
"Si se tarda más de diez años no será por problemas tecnológicos, sino por el coste de estos vehículos y por la legislación, que tendría que cambiarse en muchos aspectos", ha señalado López de Mántaras.
Sin embargo, el director del CSIC ha precisado que, hasta ese momento, los automóviles "incorporarán nuevos mecanismos racionales que permitirán mejorar la seguridad de los conductores", como sensores para detectar la somnolencia o sistemas para evitar movimientos bruscos al volante.
Además del campo de la automoción, López de Mántaras ha augurado "importantes avances" en los videojuegos, la medicina personalizada o la incorporación de robots ayudantes, por ejemplo, en las salas de operaciones, aunque ha sostenido que las mejoras en términos de inteligencia artificial "se apreciarán en todos los ámbitos".