Las antenas de los autos: menor tamaño, más potencia

Las antenas de los autos: menor tamaño, más potencia

Durante años, la larga antena del vehículo fue el símbolo de la recepción de radio, pero con el tiempo el tamaño se ha ido reduciendo por el avance de la tecnología de recepción.

"Las antenas son ahora mucho más sensibles, y la electrónica que hay detrás permite que los receptores sean más pequeños", explica Roland Stehle, experto en tecnología de comunicaciones y entretenimiento.

Pese a la reducción de tamaño, la capacidad actual de las antenas es mucho mayor. "Las antenas largas eran por una cuestión de recepción de radio, mientras que las actuales, mucho más pequeñas, son sistemas también para la navegación y la recepción de telefonía móvil", dice Michael Heise, director ejecutivo de la compañía Kathrein Automotive, en referencia también a esas "aletas de tiburón" colocadas en muchos techos de vehículos por cuestión de diseño. Las antenas invisibles ya son hoy en día habituales.

"Desde un punto de vista técnico lo que importa es que la antena funcione de forma óptima si hay suficiente espacio", dice Heise. Los fabricantes buscan y encuentran cada vez más lugares en los que las antenas se colocan de forma imperceptible para la vista, como por ejemplo en la misma luna.

"El rendimiento de una antena en el cristal es al menos comparable con el de una antena de varilla, ya que permite colocar varias que trabajan coordinadas en un sistema", dice Heise.

Gracias a nuevas tecnologías y materiales también hay sistemas que se integran en los espejos. Para la recepción de radio se puede usar también el cableado de la calefacción del cristal trasero. Las antenas laminadas en espejos tienen además la ventaja de que son flexibles, planas y adoptan la forma que sea necesaria.

Las características de recepción de estos nuevos sistemas no son peores que los tradicionales, tampoco a altas velocidades, como a menudo se presupone. "La calidad de la recepción de radio es técnicamente independiente de la velocidad. La impresión de una peor recepción se debe a que el ruido en el auto es mayor a más velocidad", explica Heise.

La recepción en onda ultracorta es sólo una parte del perfil de exigencias. "Hoy nos comunicamos a través de más frecuencias con funciones altamente diferenciadas: junto a la radio clásica hay a bordo sistemas de comunicación aptos para la red UMTS o LTE", explica Josef Schloßmacher, de Audi. "Además, las redes Wifi en el auto son ya una realidad e incluso la recepción de televisión es posible a través de antenas integradas", agrega.

Además, muchos vehículos están preparados ya de serie con sistemas de radio digital, para cuya recepción ya no vale una antena para onda corta o media. La ventaja para el conductor está en que hay un plus de información, ya que junto a música y voz también pueden transmitirse informaciones como las condiciones del tráfico.

La digitalización hace que el grado de conectividad en el coche aumente y con ello la exigencia de las antenas. "Utilidades para la conexión 'car-to-car' o 'car-to-infrastructure' se basan ya en nuevas frecuencias", afirma Heise. Las antenas deben cubrir por ello un mayor espectro. "Además, frecuencias telefónicas para LTE (4G) y en el futuro también 5G hacen posible otros servicios para vehículos en un mundo cada vez más conectado", añade el experto.

Schlossmacher, el hombre de Audi, considera que la comunicación entre dos vehículos a través de antenas ofrece ventajas de seguridad. "Si un auto se desliza por el hielo, puede alertar inmediatamente del peligro a otros vehículos, que reciben directamente el mensaje en su sistema de navegación".

Cuanto más compleja es la tecnología de recepción para el auto, más difícil es reequipar el vehículo. "Una antena para la radio digital se puede agregar o cambiar, pero la que pone el fabricante de serie será la primera elección", aconseja Stehle si se desean conseguir los mejores resultados de recepción.

Tampoco merece la pena los cambios desde un punto de vista financiero. "Suele ser caro y a veces ni siquiera es posible por el equipamiento especial del vehículo", dice Heise. Cada vez se hacen más difíciles los cambios debido a la conexión interna de los sistemas de a bordo.

El desarrollo de sistemas de entretenimiento cada vez más complejos y que se alejan de la radio sencilla y tradicional ha tenido un gran impacto en el negocio de los componentes. "Al igual que ha decrecido el cambio de aparatos de radio, también lo ha hecho el de antenas", dice Stehle, que asegura que las ventas de radios de 2004 a 2014 se han reducido un 80 por ciento.

Temas relacionados
Cargando...
Load next