El galés se sobrepuso por la tarde a un problema en la dirección para completar la penúltima jornada de esta segunda prueba del Campeonato del Mundo de Rallyes FIA con una ventaja de 17.9 segundos.
Evans ganó a los mandos de su Ford Fiesta R5 el primer tramo que se disputó por la mañana en los bosques nevados cercanos a Hagfors. Pero Tidemand (foto inferior), que había cedido terreno el día anterior por la rotura de un eje de transmisión, logró dos victorias parciales y dos segundos puestos con su Skoda Fabia R5 para reducir la diferencia a 42.5 segundos.
"Pontus ha pilotado hoy muy bien, pero hemos tenido algunos pequeños problemas, por lo si todo va según lo previsto deberíamos tener un margen suficiente para afrontar la última etapa de mañana", dijo Evans.
"Hemos tenido un problema con la dirección. No estaba seguro de lo que era en ese momento, pero me transmitía una sensación extraña en el coche, y hemos perdido algunos segundos. Hemos logrado encontrar el problema y hacer un arreglo temporal en el enlace, pero no me sentía al cien por cien cómodo con la forma en que se comportaba el coche después de eso ".
Anders Grøndal se sobrepuso a una enfermedad para mantenerse tercero en la clasificación con un Fiesta R5, pero el finlandés Esapekka Lappi se le acercó rápidamente después de ganar dos tramos con su Fabia R5. La brecha entre ambos es ahora de 8.7 segundos.
Eyvind Brynildsen terminó la etapa quinto a bordo de otro Fiesta R5. Emil Bergqvist completó el top seis con un DS 3 R5. La diferencia entre ellos se cifra en 9.7 segundos.
Fredrik Åhlin fue el piloto que más decepcionado se mostró en el transcurso de la jornada. El noruego cedió un minuto en la primera especial a causa de un pinchazo, pero remontó después a la tercera plaza. Sin embargo, se tuvo que retirar antes de tiempo al arrancar una rueda de su Fiesta R5 en la penúltima especial.
Hubert Ptaszek también tuvo que abandonar con la suspensión dañada, y Max Rendina por problemas mecánicos.