Cuádruple campéon del mundo, Vettel dio un puñetazo en tablero de la Fórmula 1 en Sepang: no sólo ganó la carrera, sino que llegó a meta con 8.5 segundos de ventaja sobre Hamilton y demostró que Ferrari dio un paso de gigante respecto al año pasado.
"Sí, sí chicos. Gracias, gracias, gracias, gracias, ¡Forza Ferrari!", gritó Vettel por la radio de su coche. "Ferrari está de vuelta", le dijeron desde boxes.
El alemán sumó su victoria número 40 en la Fórmula 1 y se quedó a un triunfo del legendario Ayrton Senna.
Mercedes llevaba ocho victorias consecutivas y había demostrado un ritmo insultantemente superior hace dos semanas en Australia, donde Vettel fue tercero por detrás de Hamilton y Rosberg.
El alemán, que no ganaba una carrera desde noviembre de 2013, consiguió la primera victoria de Ferrari en casi dos años. Y lo hizo en la que fue su segunda carrera con el bólido de Maranello.
El último triunfo de Ferrari fue en mayo de 2013, cuando el español Fernando Alonso, que hoy abandonó en su debut con McLaren-Honda, se impuso en el Gran Premio de España.
Hamilton, actual campeón del mundo y que salía desde la pole position, mantuvo el liderato de la clasificación gracias a su segundo puesto en Sepang. El británico tiene 43 puntos, mientras que Vettel cuenta con 40. Rosberg es tercero con 33.
Vettel mantuvo en la salida la segunda posición y se colocó primero cuando Hamilton entró en boxes en la vuelta seis, cuando salió un safety car. El piloto de Ferrari optó por continuar en pista y hacer una estrategia de dos paradas. Hamilton y Rosberg eligieron tres entradas a boxes.
Más allá de las diferentes estrategias, el Ferrari de Vettel no era más lento en la pista que los Mercedes. Es más, por momentos rodaba a más velocidad que las "flechas de plata".
El otro Ferrari, el del finlandés Kimi Raikkonen, fue cuarto, seguido de los Williams del finlandés Valtteri Bottas y del brasileño Felipe Massa.
El holandés de 17 años Max Verstappen fue séptimo, seguido por su compañero en Toro Rosso, el español Carlos Sainz.
McLaren vivió una nueva jornada para el olvido: Alonso y el británico Jenson Button no lograron terminar el Gran Premio, evidenciando el gran trabajo que tiene por delante la fábrica de Woking.