“Por falta de inversión no tenemos hoy la producción que deberíamos tener y estamos dejando de tener peso como país petrolero, lo que es algo delicado”, indicó el líder parlamentario en un comunicado de prensa.
El legislador federal recordó que en 2004 la producción petrolera en México tuvo su mejor año, alcanzó 3 millones 382,000 barriles de petróleo diarios, para desplomarse a 2 millones 440,000 barriles de petróleo en 2014, lo que equivale a un retroceso de 942,000 barriles de petróleo cada día.
“La declinante producción fue insensible a los sustantivos incrementos de las inversiones en Pemex que erogó 251,882 millones de pesos, 268,599, 267,261 millones, 311,993 millones y de 330,600 millones; en 2009, 2010, 2011, 2012 y 2013, respectivamente”, agregó Alonso Raya.
Refirió que el embajador mexicano en Estados Unidos, Eduardo Medina Mora, anunció que México analiza importar hasta 100 mil barriles diarios de crudo ligero de Estados Unidos, con lo que se busca optimizar el funcionamiento de las refinerías de Pemex.
“Uno de los problemas es que no se invirtió para reconfigurar las refinerías y procesar el crudo pesado”, que es el que produce Pemex, resaltó el diputado perredista.
Aseveró que “está omisión tuvo como resultado la insuficiente capacidad de producción en Pemex Refinación, razón por la cual ahora el país importa cerca de 40 por ciento de la demanda de gasolina. La elaboración de gasolinas pasó de 398.2 miles de barriles diarios, en 2002, a 418.1 en 2012”.
Es decir, remarcó el legislador, “el incremento absoluto fue menor a 20,000 barriles diarios, en tanto que entre 1993 y 2007 el valor de las importaciones pasó de 5,500 millones a 16,800 millones”.
En opinión del coordinador, “en la coyuntura actual lo que más conviene en este momento es comprar la gasolina, misma que está más barata en Estados Unidos que en México”.
“Desde octubre no ha parado el desplome del precio del barril del petróleo, que ayer (miércoles) se cotizó en 39.94 dólares, es decir, una diferencia de más de 39 dólares respecto al precio fiscal aprobado en el Congreso de la Unión para 2015”, enfatizó.
Por el decremento del precio del petróleo y la competencia entre los expendedores, las gasolinas son más baratas para los consumidores del vecino país del norte que en México, subrayó.
El perredista señaló que las últimas cifras de los reportes operativos de Pemex muestran una declinación en la elaboración total de productos petrolíferos: entre agosto de 2013 y agosto de 2014, se dejaron de producir 64,000 barriles diarios de productos petrolíferos en promedio, una caída anual de 4.33 por ciento.
“No preparamos las instalaciones, las empresas y las refinerías para tener la capacidad de procesar lo que producimos nosotros y eso nos obliga, en todo caso, a buscar la manera de importar crudo ligero y entre otras cosas a comprar gasolinas”, apuntó.
“Pero ésas son medidas coyunturales que intentan ocultar el problema de fondo que es que México no está produciendo lo que debiera desde el punto de vista de la explotación petrolera”, concluyó Alonso Raya.