Otra contratista de Petrobras recurre a la justicia para evitar la quiebra

Otra contratista de Petrobras recurre a la justicia para evitar la quiebra

El grupo empresarial brasileño Schahin recurrió hoy a la Justicia con el fin de evitar la bancarrota, con lo que se convirtió en la sexta contratista de Petrobras sospechosa de vínculos con el escándalo de corrupción en la estatal que tuvo que buscar esa solución ante la falta de acceso al crédito.

El anuncio fue realizado hoy por el grupo, que indicó que el pedido abarca a 28 empresas del conglomerado.

"En los últimos meses hemos hecho todos los esfuerzos posibles para evitar la recuperación judicial, desde intentos de lanzar títulos en el mercado de capitales, a la renegociación de pasivos existentes y hasta la transferencia de contratos de obras. Infelizmente, sin éxito", expresó el grupo.

La iniciativa adoptada por Schahin y otras cinco empresas socias de la estatal -Inepar, Alumini, Jaraguá, Galvao Engenharia y OAS- se denomina en Brasil proceso de recuperación judicial.

Se trata de un dispositivo legal destinado a evitar la bancarrota de empresas que perdieron momentáneamente la capacidad de pagar sus deudas, preservando, dentro de lo posible, la producción y las fuentes de trabajo.

Para que el pedido sea aceptado, la empresa debe estar en condiciones de ofrecer un plan de reestructuración que abarca la renegociación de sus deudas y la reorganización de los negocios, entre otro aspectos.

En el comunicado, Schahin lamenta "especialmente" los consecuentes despidos de empleados derivados de esa reestructuración, pero no informa cuántos fueron cesados.

El grupo dice además que "confía sólidamente en la recuperación de su capacidad empresarial en el plazo más breve posible".

Según informó el portal del diario "Folha de Sao Paulo", el grupo vinculado a las áreas de ingeniería, desarrollo inmobiliario, telecomunicaciones, petróleo y gas y energía, tiene deudas que rondan los 12,000 millones de reales (unos 4,000 millones de dólares).

Las seis empresas que hasta el momento tuvieron que recurrir al salvataje judicial para no quebrar integran el grupo de contratistas de Petrobras investigadas por sus presuntos vínculos con la red que desvió millonarias sumas de la estatal entre 2004 y 2012.

Se sospecha que las compañían formaron un cartel para repartirse las licitaciones de la petrolera, pagar sobornos e inflar contratos.

A raíz de las investigaciones, 23 empresas socias de Petrobras perdieron o vieron restringido su acceso al crédito, lo que les provocó serios problemas de liquidez.

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