La tasa de interés para préstamos a un año bajó al 5.35 por ciento. El banco central chino también redujo en un 0.25 por ciento el tipo de interés para depósitos a un año, que ahora se sitúa en el 2.5 por ciento.
Es la segunda vez en tres meses que el banco emisor chino reduce los tipos de interés en un intento de revertir la ralentización del crecimiento de la segunda economía mundial. El producto interior bruto de China aumentó el año pasado un 7.4 por ciento, el crecimiento más bajo registrado en 24 años, según cifras oficiales.
La próxima semana se celebrará la asamblea anual del Congreso Popular Chino. Se prevé que el primer ministro Li Keqiang anuncie para este año un objetivo de crecimiento notablemente más bajo, de un 7.0 por ciento o incluso menos, según cálculos de expertos.