En las últimas semanas los productos de la canasta básica se han mantenido al alza, de acuerdo con el Índice de Precios ANPEC: el jitomate $36, el aguacate hasta en $89, el huevo $42, el azúcar y el limón $45; los precios varían en las diferentes áreas metropolitanas del país.
Los costos al alza impactan a los pequeños comerciantes, quienes son la fuerza emprendedora en México al generar 2 millones de autoempleos, en más de 1 millón de puntos de venta y garantizan el 48% del abasto nacional. Sin embargo, la escalada de precios no se detiene, está mermando las ventas y la posibilidad de mantenerse estables; ya ni hablar de una mejora en la situación económica.
Como hemos comentado anteriormente, los precios se encarecieron en un primer momento por la devaluación del peso frente al dólar, que motivó la elevacion de los precios de las gasolinas y los energéticos, impactando el precio de los productos por los gastos de traslado y suministro.
ANPEC observa con preocupación la incertidumbre generada por la renegociación del TLC; el acuerdo azucarero resulta ser un mal augurio de esta renegociacion, ya que demuestra a todas luces las intenciones del gobierno de los Estados Unidos de obstruir el desarrollo económico de México.
ANPEC levanta la voz de nueva cuenta para lanzar una alerta por la elevación de los precios de los productos de consumo popular y por la posiblilidad de que la situación económica se complique aún más por los resultados adversos que eventualmente en la renegociación del TLC por arrancar en el mes de agosto.
Solicitamos al gobierno que tome acciones preventivas ante una eventual agudización de la crisis económica del país, blindar los precios de los productos de la canasta básica incrementar los salarios de los mexicanos, crear empleos bien remunerados y sumarnos de manera activa al coro mundial contra el proteccionismo y la construcción de muros.
México debe declararse a favor de la globalización y de la construcción de puentes entre los pueblos.
Hacemos un llamado a la sociedad a cuidar de su economía, a fomentar el comercio local, a denunciar y a combatir cualquier tipo de especulación en los precios de los productos. Debemos estar unidos en la defensa del derecho que como ciudadanos tenemos al poder de compra, que garantice una vida digna y de calidad para nuestras familias.