De acuerdo con Banco Base, la sesión de hoy se caracterizó por un fortalecimiento generalizado del dólar frente a todas las divisas de economías emergentes y sus principales cruces de economías avanzadas.
Expuso que los factores que ocasionaron la depreciación del peso fueron los precios del petróleo que continuaron a la baja como consecuencia de la creciente producción petrolera en Estados Unidos, y más recientemente en Libia, lo que dificulta los esfuerzos de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) por controlar la sobreoferta global de crudo.
Al ser la divisa latinoamericana más líquida, la moneda mexicana también reaccionó a noticias negativas para la región, a la par del real brasileño, el cual cerró con una depreciación de 1.50 por ciento y venderse en 3.3322 reales por dólar.
Por otro lado, los mercados de capitales a nivel global fueron golpeados por un debilitamiento de los precios del petróleo, que afectó a las empresas del sector energético, en particular en Estados Unidos.
Además, durante las primeras dos sesiones de la semana se observó una corrección en el mercado de dinero, al reducirse la demanda por deuda soberana de México.
La entidad financiera agregó que este día el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) dio a conocer los indicadores de crecimiento económico por el lado de la demanda agregada, datos que corresponden al primer trimestre.
El dinamismo de dicho crecimiento al inicio del año recayó en el consumo privado y las exportaciones, al emplear cifras ajustadas por estacionalidad, el crecimiento trimestral del consumo fue de 0.67 por ciento, al avanzar por 10 trimestres de manera consecutiva.
Por su parte, las exportaciones de bienes y servicios crecieron a una tasa trimestral de 4.43 por ciento. Ambos rubros cubren 76.7 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) correspondiente al primer trimestre.
Por el lado menos favorable, destacó que la inversión cayó a una tasa trimestral de 0.72 por ciento, ante un retroceso trimestral de la inversión pública de 3.73 por ciento y un retroceso de 0.73 por ciento de la inversión privada.
La menor inversión está relacionada a la incertidumbre económica tras las elecciones presidenciales del vecino país del norte.
En ese sentido, se espera que la desaceleración de la inversión continúe presente en las estadísticas del segundo trimestre, y con una renegociación favorable del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), es probable que la inversión muestre un repunte hacia el cierre del año.
En este escenario, el dólar libre cerró la jornada cambiaria hasta en 18.54 pesos a la venta, 19 centavos más en comparación con el día previo, y se compró en un precio mínimo de 16.95 pesos en bancos de la Ciudad de México.