Moody's mantiene la calificación crediticia y la perspectiva negativa de México

Moody's mantiene la calificación crediticia y la perspectiva negativa de México

La agencia Moody' s confirmó ayer que mantuvo igual la calificación crediticia de México pese a una disminución de riesgos sobre los pasivos de la estatal Petróleos Mexicanos (Pemex) y avances en la consolidación fiscal.

En un comunicado, la calificadora de crédito expuso que, a pesar de la mejoría, decidió mantener la perspectiva negativa en la nota soberana de México, que determinó desde abril del año pasado, ante el riesgo de que su economía sea afectada por cambios en la política comercial de Estados Unidos, su principal socio.

La calificación soberana del país se mantuvo en "A3" porque los ingresos fiscales del gobierno mexicano aumentaron un 11.9 por ciento en 2016 como reflejo de la reforma tributaria, el incremento de empleos formales y el diferimiento de pagos, señaló la agencia.

Asimismo, detalló que el año pasado el gobierno mexicano aumentó 9.1 por ciento, en términos reales, sus ingresos debido a la mayor recaudación, mientras que subió 1.4 por ciento su gasto corriente ante una contención de gastos y reducción de inversión pública.

La situación financiera de Pemex mejoró con relación al inicio de 2016 por la implementación de un programa de reducción de gastos, por el aumento de los precios del petróleo y el apoyo de liquidez desde el gobierno, indicó la firma que tiene cobertura en 130 países.

Además, pronosticó que la petrolera no requerirá apoyo financiero del gobierno en éste ni el próximo año, en tanto que en 2019 podría necesitar un monto que ronde el 0.2 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).

"Lo anterior contrasta con la situación que enfrentó a principios de 2016, cuando Moody' s consideró que la compañía petrolera paraestatal requeriría apoyo del gobierno para cubrir sus necesidades de financiamiento a lo largo de 2016-19", apuntó la calificadora.

La firma sustentó la perspectiva negativa en las preocupaciones por los cambios en políticas comerciales de Washington propuestos por el presidente estadounidense Donald Trump, entre éstos, la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) vigente desde 1994.

Moody' s prevé que la discusión del pacto regional represente sólo cambios moderados; sin embargo, advirtió que existe la posibilidad de que la Casa Blanca adopte medidas más amplias que distorsionen el comercio bilateral e impacten de forma negativa en el crecimiento económico de México.

"La perspectiva negativa también refleja que un incremento en los riesgos percibidos por los inversionistas previo a la conclusión de las negociaciones del TLCAN, al cierre de 2017 o principios de 2018, pudiera comprometer la estabilidad macroeconómica y financiera, directa o indirectamente", agregó la calificadora.

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