Precisó que como lo anunció la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, el incremento a la gasolina Premium será de 34 centavos, la Magna de 24 y el Diésel quedará igual.
“Es un impacto menor; sin embargo, hay que recordar que el 50 por ciento de las gasolinas que se consumen en el país es de importación y, evidentemente, si el dólar está mucho más caro, pues tiene que repercutir en este costo”, aclaró en entrevista.
Sobre el desabasto de gasolina en Chiapas y Oaxaca por los bloqueos, precisó Trujillo Zentella que es un tema que debe resolverse a la brevedad, junto con el suministro de alimentos a poblaciones rurales que están incomunicadas.
“Es un tema delicado en el que las autoridades tienen que tomar una decisión que permita resolverlo. Los bloqueos no tienen ninguna razón de ser. Los maestros estaban exigiendo una mesa de diálogo y esa ya se dio. Me parece que la Secretaría de Gobernación debiera exigirles que levanten esos bloqueos”.
Para alcanzar el abasto se debe lograr que se desbloquen las carreteras para que los transportes de Diconsa y otros proveedores puedan acceder a las comunidades donde no están llegando los alimentos, al igual que las pipas de gasolina.
Respecto a que las gasolinas importadas supuestamente de China estaban causando mayores niveles de contaminación, recalcó que los energéticos que se distribuyen en el Valle de México y en la zona conurbada de Guadalajara y Monterrey cumplen con los estándares establecidos.
El problema que se tiene en el Valle de México es que, independientemente de las características geográficas propias, existen industrias mucho más contaminantes que los propios vehículos particulares, así como un transporte colectivo en condiciones muy deficientes y elevada emisión de sustancias que dañan el ambiente.
En cuanto a la proyección del precio de la mezcla mexicana para 2017, comentó que debe ser una propuesta “razonable y conservadora”, porque no se ve en el horizonte del corto plazo que los precios del petróleo puedan regresar a los niveles de meses pasados o años anteriores.
“Sí creo que vamos a lograr un precio más estable, alrededor de los 40 dólares por barril; creo que la Secretaría de Hacienda tendría que ser muy conservadora en su cálculo y estimación”, enfatizó la legisladora.