Anaya González explicó que el principal objetivo es que a través del cabal cumplimiento del Reglamento de Tránsito Metropolitano, se asegure que los usuarios de motos y motonetas circulen con este tipo de vehículos bajo todas las normas de seguridad, además de que cuenten con los lineamientos establecidos que garanticen que su medio de transporte no esté involucrado en el acto de ilícitos.
“Es necesario que la Secretaría de Seguridad Pública redoble esfuerzos para hacer cumplir el Reglamento de Tránsito, para que los motociclistas cumplan con la norma mínima de seguridad de circular con casco, así como con su respectiva tarjeta de circulación para tener el debido registro y así descartar que se trata de un vehículo que pueda estar participando en la comisión de delitos”, sostuvo.
El integrante de la Comisión de Atención a Grupos Vulnerables, refirió que los conductores de motocicleta junto con peatones y ciclistas se encuentran dentro de la clasificación de usuarios vulnerables de las calles, y que más del 40 por ciento de las muertes en accidentes viales corresponden a este sector.
“Debido a la poca protección con que cuentan los motociclistas, al igual que ciclistas y peatones, ellos corren un riesgo más alto que los conductores y pasajeros de automóviles y vehículos de mayor tamaño. Al año, en nuestro país ocurren más de 40,000 accidentes de motocicleta, en donde alrededor de 900 personas mueren. Por lo que resulta urgente que la autoridad vigile que los usuarios de motocicletas cumplan con las normas destinadas a proteger su integridad y que muchos hacen caso omiso de ellas como son utilizar casco, respetar los límites de seguridad y no viajar más de dos personas en este tipo de transporte”, declaró.
Por otra parte, el legislador del GPPAN señaló que las motonetas y motocicletas que presentan irregularidades documentales, pueden ser indicadores de peligro para la población, no sólo por las faltas al Reglamento de Tránsito, sino también por las posibles implicaciones en hechos delictivos graves, ya que al carecer de la documentación requerida están operando de forma poco confiable estas unidades.
“El número de ilícitos en los que utiliza una moto o motoneta se ha incrementado. Los delitos más frecuentes son el robo a pasajeros de autos, a transeúntes, cuentahabientes y narcomenudeo. Durante 2014, la Secretaría de Seguridad Pública del DF, detuvo a más de 770 personas por cometer delitos a bordo de motocicletas, por lo que resulta urgente reforzar el Operativo Relámpago, cuyo objetivo es evitar que estos vehículos irregulares transiten, para evitar que sean utilizados para la comisión de delitos”, dijo.
Por último, el diputado panista destacó la falta de cifras claras y actualizadas sobre la siniestralidad en motos y motonetas, y subrayó entre otros riesgos para los motociclistas la falta de regulación del cumplimiento del Reglamento de Tránsito Metropolitano, una infraestructura deficiente para motos y bicis, así como la carencia de una licencia específica para este tipo de transporte.