Pagar por ingreso de autos al Centro Histórico debiera aplicarse con mejoras al transporte

Pagar por ingreso de autos al Centro Histórico debiera aplicarse con mejoras al transporte

El pago por ingresar con automóvil a determinados puntos de la ciudad no es algo que suela hacerse en muchos lugares del mundo, aunque es una medida importante y necesaria ante la gran carga vehicular, señaló el maestro Roberto Eibenschutz Hartman, presidente del Comité del Programa Universitario de Estudios Metropolitanos de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).

Al referirse en entrevista a la posible aplicación de un plan de tarifas para cobrar a automovilistas por ingresar a lugares específicos de la ciudad –el Centro Histórico capitalino, como mencionó recientemente la titular de Nuevo Modelo de Movilidad, Laura Ballesteros– el investigador de la Unidad Xochimilco dijo que se trata de acciones que deben aplicarse, pero junto con otras dirigidas a mejorar las condiciones actuales del transporte público.

Eibenschutz Hartman, quien es profesor distinguido de la UAM, precisó que apoyaría la medida, siempre y cuando se brinde información suficiente sobre el tema y se haga la debida difusión para demostrar que el servicio de transporte público está mejorando.

“Es importante restringir el uso del transporte privado, pero siempre y cuando se tenga una opción pública que pueda brindar comodidad y eficiencia a los usuarios”.

El ex secretario de Desarrollo Urbano y Vivienda del gobierno del Distrito Federal sostuvo que entre las medidas más elementales que tendrían que llevarse a cabo de manera paralela al cobro por ingresar a determinados sitios están fortalecer las líneas ya existentes de Metrobús y Metro, y hacer un esfuerzo por que sigan creciendo, pues “todavía se trata de sistemas de transporte muy elementales y necesitan una mayor expansión”.

También se requiere un esfuerzo muy grande para que se cumpla la reglamentación de tránsito, porque en la ciudad “el estacionamiento en las calles estorba mucho más que los que circulan; la gente se estaciona en segunda y tercera filas, y hay camiones de carga que con cualquier pretexto obstruyen el tránsito, entre otras problemáticas que generan muchas complicaciones en el funcionamiento” urbano.

El maestro Eibenschutz Hartman refirió que como cualquier medida que toma el gobierno, siempre habrá una parte de la población que esté en contra, por lo que se tiene que difundir información de aspectos como la cantidad de vehículos que hay en la ciudad, los problemas de congestión vial que se generan, los horas-hombre que se pierden diariamente en el transporte por esa causa, entre otras.

En México “vamos muy atrasados” en cuanto a la implementación de medidas para mejorar la movilidad, aun cuando en el mundo existen numerosas experiencias similares.

Por ejemplo en Singapur esto se empezó a hacer hace 40 años y en la actualidad la gente ya sabe en qué horarios se tienen costos menores para entrar y entonces el tránsito se distribuye a lo largo del día y no forzosamente en las horas llamadas pico.

El investigador de la UAM confió en que con información adecuada y dando cabida a las distintas opiniones, “en un tiempo razonable se pueda establecer ese tipo de medidas”.

De acuerdo con una nota publicada por el diario La Crónica, el modelo del cobro de tarifas estaría basado en la llamada tarifa de congestión impuesta en Londres, donde los conductores que circulan en la zona central pagan ocho libras, equivalentes a 203 pesos mexicanos.

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