Tras bloquear varias horas algunas carreteras de este país para que el Ejecutivo autorizara la llegada de camiones cargados de vehículos quemados a la sede de gobierno, parte del convoy fue permitido de llegar esta noche hasta el centro de la capital.
El gobierno se negó varias horas a autorizar el ingreso a Santiago de 13 camiones con las máquinas siniestradas, argumentando que provocaría congestión vehicular, pero tras un diálogo con los dirigentes del gremio fue aprobado el paso de seis máquinas.
El presidente de la Confederación Nacional de Transportistas de Chile (CNTC), Sergio Pérez, encabezó una delegación de camioneros que se reunió esta noche en la sede de gobierno con el ministro del Interior, Jorge Burgos.
Tras el encuentro, Pérez dijo a periodistas que se impuso el diálogo y denunció una falta de seguridad hacia el convoy a su paso por el frontis de La Moneda, luego que los camiones fueron “emboscados” y atacados con objetos contundentes.
Valoró la decisión de Burgos de dialogar y pidió la aplicación de la ley antiterrorista para quienes ataquen los camiones que circulan por las carreteras del país, además de proyectos de ley “para terminar con la impunidad”.
El dirigente gremial, que anunció la instalación de mesas de trabajo con el gobierno para resolver los problemas más graves de los transportistas, dijo que la delincuencia está “desatada” en esta nación sudamericana.
Burgos comentó a periodistas que los camioneros le entregaron un documento de peticiones que analizará en los próximos días, tras lo cual se podría generar un diálogo formal con el gremio del transporte.
Precisó que todas las carreteras de Chile están despejadas y funcionando con normalidad, tras varias horas de bloqueo de los camioneros, y agregó que “el país funciona con plena normalidad”.
Al paso de la caravana de camiones se registraron varios incidentes frente a La Moneda, protagonizados por sectores partidarios de los mapuches, que lanzaron objetos contundentes a los vehículos y a los partidarios de los transportistas.