El café, los huevos, las nueces, el arroz y las lentejas podrían encontrarse tanto en el interior de su futuro automóvil como en su cesta de la compra, según un nuevo estudio realizado por la consultora de diseño e ingeniería CALLUM.
Los diseñadores e ingenieros fueron más allá de los materiales que ya estaban bajo consideración para identificar nuevas opciones sostenibles de las que sus clientes podrían beneficiarse a través de su estudio de diseño de SMS. Utilizando el interior de un Porsche 911 retromodificado como base para la investigación, el equipo dirigido por Charlotte Jones e Ian Callum identificó pulpa de café, cáscaras de huevo, lentejas rojas, nueces y arroz como materiales viables para el interior de un automóvil en 2030.
Desperdicio de alimentos
Con miles de toneladas de alimentos desperdiciados todos los días solo en el Reino Unido, CALLUM consultó con la empresa de tecnología ecológica Ottan para determinar los materiales más apropiados capaces de reemplazar los plásticos y aún así cumplir con los rigurosos requisitos de diseño, ambientales e ingeniería de un automóvil. Las soluciones identificadas que podrían cumplir con las especificaciones de temperatura y desgaste incluyeron la adopción de cáscaras de huevo mezcladas con resina para crear un material suave y opaco con una superficie brillante o mate. Los ejemplos de aplicación incluyen el marco de ajuste para los interruptores de las ventanas. Al agregar cáscaras de nuez a las cáscaras de huevo, el contenido reciclado del material de Ottan aumenta del 78% al 84%.
El arroz o las lentejas caducados se pueden convertir en un material translúcido suave, ideal para áreas iluminadas del automóvil, como cubiertas de lámparas o interruptores iluminados. Como alternativa resistente a las llamas, la pulpa de café podría reemplazar los plásticos tradicionales por molduras decorativas brillantes, como inserciones en el tablero.
Deseoso de demostrar que los materiales sostenibles aún pueden ofrecer colores vivos, CALLUM identificó pulpa de zanahoria morada que produce un color similar a la mora para las molduras. Las hojas de los árboles se pueden reciclar en una superficie lisa y oscura que ofrece un acabado natural alternativo a las chapas de madera para la consola central o el tablero.
Desperdicio de ropa
Dado que los asientos requerían una combinación de resistencia al desgaste, comodidad y solidez del color, CALLUM optó por materiales de segunda mano que normalmente irían a parar a los vertederos. “En todo el mundo, consumimos aproximadamente 62 millones de toneladas de textiles al año y alrededor del 87 por ciento de la fibra total utilizada para la ropa se desecha en vertederos o se incinera”, dice Charlotte Jones, directora de materiales y sustentabilidad de CALLUM. “Empresas como Planq toman jeans, luego los trituran y los prensan con patata o almidón de maíz para crear una capa dura que podría usarse para los armazones de los asientos o los centros del tablero. El estudio de diseño de SMS fue creado por CALLUM para ilustrar que hay otra manera, y podemos ayudar a los fabricantes y proveedores a identificar alternativas de ingeniería que los consumidores finales buscan cada vez más”.
Residuos de plástico
Los revestimientos centrales de los asientos en el estudio de diseño de CALLUM utilizan Camira, un tejido fabricado con residuos plásticos marinos como el poliéster, mientras que las superficies de los cabezales están recubiertas de Féline, un material blando producido a partir de botellas de PET. Ninguno ofrece ninguna penalización de peso, otro factor considerado para el restomod en el que se basa el estudio, y, de manera crucial, cada uno puede reciclarse nuevamente si es necesario. Para la alfombra, Jones propone Econyl, un material que utiliza alfombras de nylon o redes de pesca para crear una nueva tela resistente.
Si bien SMS es un concepto, CALLUM seleccionó materiales que cumplen o tienen el potencial de cumplir con los requisitos automotrices y ser factibles de producción para 2030; el siguiente paso es probar los materiales en los próximos proyectos. Demostrando la relevancia de sus estudios de sostenibilidad, CALLUM ya ha diseñado una opción compuesta de cáñamo/lino que los compradores ahora pueden seleccionar en su último proyecto, el scooter Barq EV.
“Más de nuestros clientes están empezando a pensar en proyectos sostenibles y ponen énfasis en la economía circular. Con otros, podríamos empujarlos por ese camino, destacando los beneficios comerciales de tomar una decisión más sostenible”, agrega el cofundador y director de diseño de CALLUM, Ian Callum.