Se pueden encontrar en el nuevo Opel Mokka y también en el superventas y premiado Opel Corsa. Pero detrás hay un largo recorrido hasta que las versiones más pequeñas de este super depredador se establecieran en Opel. A fin de cuentas, no es de extrañar, ya que el fabricante ha tenido predilección por lo marítimo desde hace décadas.
Las berlinas Kadett, Admiral y Kapitän marcaron el camino. Los antiguos buques insignia de la marca deleitaron a los clientes de la marca con su inconfundible diseño. La afinidad marítima se mantuvo en Opel, pero con el tiempo se trasladó a otras criaturas que se encuentran bajo el mar. En 1970 Opel presentó el Manta, un coupé deportivo que lucía con orgullo su logotipo en forma de raya en el exterior. A día de hoy, el Manta sigue despertando tantas emociones que, para deleite de sus seguidores, ha vuelto como vehículo de cero emisiones, como: Manta GSe ElektroMOD.
Los diseñadores de Opel concedieron una gran importancia al diseño del característico logotipo del Manta. Con la misma atención por el detalle han trabajado con estos tiburones durante más de una década y media. “Comenzó hace 17 años y se ha convertido en un auténtico icono”, expone Karim Giardimaina, Ddirector de Diseño.
La historia del tiburón: cómo la idea de un niño se convirtió en un diseño de culto
¿Entonces, de dónde vienen los tiburones? Un domingo de 2004 el diseñador de Opel Dietmar Finger estaba en casa dibujando una idea para el nuevo Corsa. Concretamente, trabajando en el poco espectacular guarnecido lateral exterior de la guantera, que está tapado la mayor parte del tiempo por la puerta del pasajero cuando ésta se encuentra cerrada. Cuando la guantera se abre, esta pared debe proporcionar estabilidad, lo que se consigue con unas nervaduras transversales en la superficie del plástico. Mientras el diseñador creaba estas nervaduras, su hijo pasó por allí, echó un vistazo al boceto y preguntó: “¿Papá, por qué no dibujas un tiburón?”. ¿Por qué no ?, pensó Finger para sí mismo. Así proporcionó a estas nervaduras la forma de un tiburón. Nació una idea y, después, una tradición. El tiburón de la guantera entró en producción. Desde entonces, la historia de éxito del “tiburón de Opel” siguió su curso. Giordimaina, responsable del diseño interior del Zafira por aquel entonces, también escondió tres pequeños tiburones en el habitáculo del monovolumen compacto. Le siguieron otros “avistamientos de tiburones”, primero en el Opel ADAM, luego en el actual Opel Astra y finalmente en los demás turismos, desde el Opel Crossland y el Opel Grandland X hasta el Opel Insignia.
Esto ha creado una tradición en Opel. Desde entonces, cada jefe de diseño de interiores se asegura de que al final del proceso de desarrollo se coloque al menos un tiburón en algún lugar del interior. Éstos no se suelen descubrir hasta el lanzamiento del coche.
Continuará: los tiburones también aparecerán en los futuros modelos de Opel
Para Giordimaina el tiburón se ha convertido en un elemento importante de Opel a lo largo de los años, y no sólo en la guantera: “Los periodistas nos preguntan ahora dónde están los tiburones cuando presentamos nuevos modelos. Siempre animo a nuestros diseñadores a esconder tiburones en el interior de los nuevos diseños. Los depredadores, cariñosamente dibujados, representan lo que distingue a Opel, la pasión por nuestros coches. Nos apasiona el diseño de nuestros vehículos y somos precisos en cada detalle. Somos accesibles, humanos y lo hacemos todo con una sonrisa en la cara. Y eso es exactamente lo que queremos que sientan nuestros clientes ”.
Los tiburones seguirán apareciendo en los futuros modelos de Opel, de una forma disimulada en ocasiones y otras veces no tanto. En función del modelo de Opel es posible que cambien de territorio en las profundidades del interior.