Hyundai es la única marca del mundo que dispone de las cinco tecnologías eléctricas: híbrido, híbrido enchufable, híbrido 48v, eléctrico y de pila de hidrógeno. Y los coches electrificados de Hyundai no son proyectos, ni conceptos: son una realidad tangible que puede adquirirse en los concesionarios y que ya tienen millones de kilómetros recorridos a sus espaldas.
Esta ventaja tecnológica nace del sólido compromiso de Hyundai con la sociedad y el planeta, de una actitud pionera con las nuevas tecnologías, y tras muchos años de investigación. Desde la creación en 1998 del departamento de desarrollo de tecnologías de pila de combustible de hidrógeno, Hyundai apostó con fuerza por la electrificación y a lo largo de estas dos décadas ha desarrollado tecnologías únicas que hoy disfrutan sus clientes.
Líderes mundiales en hidrógeno
Hyundai lanzó en 2013 el primer automóvil del mundo de pila de combustible de producción en masa: el Tucson Fuel Cell. Y en 2018 presentó el Nexo, que se puede adquirir en los concesionarios de la marca. Hyundai producirá en 2020 11,000 vehículos de hidrógeno, cifra que aumentará a 40,000 unidades en 2022, a 130,000 en 2025 y a 500,000 en 2030; siguiendo el plan ‘FCEV Vision 2030’ de la marca.
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Esta historia de éxito arranca con la creación del departamento de desarrollo de tecnologías de pila de combustible de hidrógeno, que en solo dos años diseña el Hyundai Santa Fe FCEV, primer vehículo de hidrógeno de la marca. Este automóvil experimental de 75 kW de potencia ya presentaba tecnologías y concepciones de las que hoy se beneficia en Nexo, desde su estilo crossover al uso de materiales ligeros, pasando por una disposición técnica que no restaba habitabilidad ni espacio de carga.
Chung Goo Lee, presidente de investigación y desarrollo mundial de Hyundai Motor Company en aquellos años, declaró al presentarlo: "Los beneficios de la protección del medio ambiente, el equilibrio entre la oferta y la demanda de energía y el propio futuro de la industria automotriz son más importantes que las dificultades técnicas que hay que superar para desarrollar la tecnología de las pilas de combustible. La importancia de esta tecnología puede compararse a la introducción del motor de combustión a principios del siglo XX".
Hyundai fue perfeccionando esta tecnología y en 2005 presentó una nueva pila de combustible de desarrollo propio, con más potencia y que dotaba de 384 kilómetros de autonomía al vehículo. En 2007, el Tucson FCEV venció en la categoría FCEV en la Michelin Challenge Bibendum, confirmando que Hyundai ya lideraba la carrera por esta tecnología. Con un depósito de 150 litros de hidrógeno y una pila de combustible de 80 kW de potencia, este modelo ofrecía una autonomía de 300 kilómetros y una velocidad máxima de 150 km/h.
Ese mismo año, ya había dos flotas de pruebas de Hyundai Tucson FCEV, una para el Departamento de Energía de Estados Unidos, con 32 unidades; y otra para miembros del gobierno de Corea del Sur, con 30 unidades.
En 2010 comienzo del desarrollo de un modelo de pila de combustible de producción en masa, que cristaliza en 2013 con el Hyundai Tucson Fuel Cell, del que se comercializaron más de 700 unidades en Estados Unidos, que recorrieron más de 4 millones de kilómetros. El rendimiento a diversas temperaturas y en diferentes estilos de conducción, el arranque en frío, el proceso de repostaje, la autonomía a plena carga… son solo algunos de los factores que se pusieron en práctica en la vida real y que han demostrado su perfecta viabilidad, fiabilidad y durabilidad en el Hyundai Tucson FCEV. Este modelo presentaba una autonomía de 594 kilómetros y cosechó numerosos muchos récords para coches de hidrógeno, como el de autonomía (700 km), distancia recorrida en 24 horas (2,382 km), velocidad máxima (170 km/h)
El Hyundai FE FCEV concept car presentado en el Salón de Ginebra de 2017 fue un anticipo del Hyundai Nexo, que supone la tercera generación de automóviles Hyundai de pila de combustible. Con una arquitectura específica y una carrocería muy ligera, el Nexo supone otro paso adelante en la evolución de la batería y la pila de celdas de combustible, que tienen más potencia neta para suministrar un motor también más potente. El tren motriz de Nexo es más ligero y compacto; y los tanques de depósito de almacenamiento de hidrógeno también se han optimizado. Este sistema de almacenamiento tiene una densidad energía mayor y puede reabastecerse en solo cinco minutos.
Gracias a todo ello, el Hyundai Nexo alcanzará los 666 kilómetros de autonomía, 168 más que su predecesor. La aceleración y la potencia también se han incrementado un 25 por ciento. Y este modelo ofrece el mismo nivel de durabilidad que los vehículos con motor de combustión interna.