La compañía informó este viernes de la caída de las ventas en sus cuatro marcas en Estados Unidos. Buick, que produce vehículos de la gama alta, fue la que menos perdió, con una reducción de las ventas del 20.1%, lo que situó las entregas en 39,299 vehículos.
Cadillac, el productor de automóviles de lujo, cayó un 31.7% a 22,519 vehículos mientras que Chevrolet, la marca de consumo masivo, perdió un 36.1%, con 287,925 unidades entregadas. Finalmente, GMC, especializada en la producción de camionetas "pickup" y todocaminos SUV, cayó un 26.7%, a 97,254 vehículos.
En los nueve primeros meses de 2021, GM vendió 1,777,483 vehículos, un 0.1% más que el año pasado, cuando los confinamientos de la pandemia afectaron tanto a la producción como a las ventas de automóviles.
Todas las marcas de GM excepto Chevrolet han entregado este año más vehículos que en el mismo periodo de 2020. Las ventas de Buick son un 27.4% superiores en los tres primeros trimestres, las de Cadillac un 10.8 % y las de GMC un 8 %. Sin embargo, las ventas de Chevrolet son un 5.6 % inferiores.
Steve Carlisle, presidente de GM Norteamérica, explicó en un comunicado que aunque la escasez de chips que afecta a todo el sector provocó la reducción de las ventas en el tercer trimestre, "la situación está mejorando".
Carlisle añadió que de cara al cuarto trimestre se enviará a los concesionarios "un flujo continuo de vehículos" que están ahora mismo retenidos en las plantas de montaje y que GM está "reiniciando la producción de plantas claves de todocaminos SUV y coches".
"Esperamos un ambiente operativo más estable durante el otoño", concluyó Carlisle.
GM también destacó que durante el tercer trimestre, la cuota de mercado de los vehículos de GM en el segmento de las camionetas "pickup" de gran tamaño creció "más de dos puntos porcentuales" y que el Chevrolet Silverado y el GMC Sierra "alcanzaron una cuota combinada del 38 %".