Mission:Zero: Audi contribuye al futuro de la producción sostenible en Neckarsulm

Mission:Zero: Audi contribuye al futuro de la producción sostenible en Neckarsulm

Como la mayor empresa industrial de la región, el centro de Audi en Neckarsulm se compromete a cumplir con su responsabilidad con la comunidad y la naturaleza.
Audi - Mission:Zero

El complejo está implementando numerosas medidas como parte del programa ambiental “Mission:Zero” puesto en marcha en 2018, desempeñando así un importante papel para que la producción de automóviles sea lo más respetuosa posible con el medio ambiente y los recursos, evitando las emisiones de carbono y los residuos. En la planta de Böllinger Höfe, dedicada a la producción de automóviles deportivos, el Audi e-tron GT ya se fabrica con un balance neutro en carbono, gracias al uso exclusivo de energía verde y calor de fuentes renovables. El objetivo es alcanzar la neutralidad de carbono en todos los centros de producción de Audi para 2025.

El cambio climático, el consumo de agua, la escasez de recursos y la pérdida de biodiversidad afectan a todo el mundo y son algunos de los principales retos hoy en día. Comprometida con los términos del Acuerdo de París, Audi trabaja activamente para crear un entorno habitable y un futuro sostenible. La marca de los cuatro aros ha combinado todas las medidas para reducir su huella de carbono en la producción y la logística en su programa medioambiental Mission:Zero.

A través de proyectos innovadores y sostenibles, la factoría de Neckarsulm es un excelente ejemplo en los cuatro campos de actividad de Mission:Zero: descarbonización, uso del agua, eficiencia de los recursos y biodiversidad.

Descarbonización: el camino hacia la producción con un balance neutro en carbono
Audi pretende alcanzar el balance neutro en la fabricación de sus vehículos en sus instalaciones para 2025. Por otro lado, innumerables medidas a lo largo de la cadena de valor están contribuyendo a la visión de Audi AG de lograr la neutralidad de carbono en toda la empresa para 2050. Böllinger Höfe es la primera factoría de la marca de los cuatro aros en Alemania que fabrica un modelo de Audi totalmente eléctrico, y lo hace de manera respetuosa con el medio ambiente. El Audi e-tron GT es un excelente ejemplo de cómo combinar altas prestaciones y conciencia medioambiental. Audi utiliza biogás para la planta que suministra calor y parte de la electricidad para la producción en Böllinger Höfe, compensando las emisiones que actualmente son inevitables recurriendo a fuentes de energía renovable o el autoabastecimiento mediante créditos de carbono a través de proyectos de compensación certificados.

Todo el emplazamiento de Neckarsulm, incluyendo Audi Sport, utiliza electricidad ecológica desde principios de 2020. Los edificios de la fábrica se optimizan continuamente en cuanto a su eficiencia energética para reducir el consumo de energía. En las cinco sedes de Audi casi 100 personas trabajan a tiempo completo para identificar y explotar nuevos potenciales de ahorro energético en la producción. El resultado fue que en 2020, Audi incluso superó sus objetivos medioambientales ahorrando un total de más de 83,000 megavatios hora de energía en todos sus centros y, al mismo tiempo, emitiendo alrededor de 11,900 toneladas menos de carbono.

Lograr el balance neutro en la producción de automóviles solo es posible si toda la cadena de valor se optimiza desde una perspectiva medioambiental. En la planta de Neckarsulm el aluminio sobrante en el proceso de fabricación ya se devuelve al proveedor desde 2017 como parte del ciclo cerrado para este material, reciclándolo y reprocesándolo para que Audi pueda volver a emplearlo. El uso de aluminio secundario obtenido en este proceso reduce el consumo de energía hasta en un 95 por ciento en comparación con el uso de aluminio primario. En la actualidad este ciclo también se utiliza en las plantas de Ingolstadt y Györ (Hungría). Desde su introducción, la marca de los cuatro aros ha conseguido un ahorro de más de 525,000 toneladas de carbono.

Audi también está comprometida con la sostenibilidad en la logística y el tráfico interno, por lo que todos los servicios ferroviarios operados por DB Cargo que transportan vehículos terminados o material hasta el centro de Neckarsulm son neutros en carbono. Para las operaciones de maniobra en las instalaciones de la fábrica se utilizan camiones con bajas emisiones de NOx, alimentados con gas natural comprimido (GNC) o electricidad. En la estación de servicio de la empresa, los vehículos se repostan con la alternativa baja en carbono R33 BlueDiesel. La infraestructura de recarga para vehículos eléctricos en la factoría, que se abastece de energía verde, sigue creciendo: para 2022 habrá 600 puntos de recarga, incluidas estaciones de carga rápida de acceso público en los estacionamientos para visitantes.

Uso del agua: un ciclo cerrado

Audi quiere mantener su propio consumo de agua lo más bajo posible y, a largo plazo, dejar de utilizar agua potable en la producción de vehículos. La empresa tiene previsto reducir a la mitad su consumo de agua por vehículo fabricado, para pasar de una media de unos 3.75 metros cúbicos en la actualidad a alrededor de 1.75 metros cúbicos en 2035. Para ello, siempre que sea posible se utilizará agua reciclada, que se reutilizará varias veces en el ciclo.

La planta de Neckarsulm tiene previsto implementar un ciclo cerrado de agua entre la fábrica y la planta de tratamiento de aguas residuales operada por AZV Unteres Sulmtal. La viabilidad de este plan se está ensayando en una planta piloto, en la que el agua residual es tratada por Audi con la ayuda de sistemas especiales de filtrado y membranas. Posteriormente, el agua del proceso vuelve a fluir a la planta de tratamiento. En este proceso la calidad del agua se controla constantemente y un laboratorio la analiza cada dos semanas. En 2022 se instalará un nuevo sistema de abastecimiento de agua que cerrará el circuito entre el centro y la planta de tratamiento de aguas residuales a partir de 2025, lo que permitirá reducir el consumo de agua dulce en un 70 por ciento.

Eficiencia de los recursos: reducir y evitar

Siempre que es posible, Audi reduce los residuos de los embalajes en sus instalaciones, utilizando soluciones respetuosas con el medio ambiente y separando sistemáticamente los materiales reciclables para que puedan ser reciclados.

El equipo de Mission:Zero “Resource” en Neckarsulm ha declarado la guerra a los residuos de plástico y está desarrollando sus propias ideas innovadoras de reciclaje. Por ejemplo, en colaboración con un fabricante de la región, Audi hace que el material sobrante de láminas de plástico sea transformado en plástico granulado. Con este material se fabrican bolsas de basura que se utilizan en el centro. Este ciclo permite reutilizar unas 15 toneladas de residuos plásticos al año. Un aspecto secundario positivo es que, gracias a este programa de reciclaje, la planta se ahorra un 40% de lo que gasta en bolsas de basura. La logística de Audi ha trabajado con los proveedores para optimizar varios paquetes de componentes, lo que ya ha permitido eliminar casi 31 toneladas de embalajes no reciclables sólo en la planta de Neckarsulm. Estas optimizaciones van desde la sustitución de materiales con un alto impacto medioambiental, como la espuma de poliestireno, hasta la eliminación total de algunos embalajes.

Un innovador proyecto piloto puesto en marcha en 2019 también triturará los residuos de envases de plástico procedentes del montaje para convertirlos en filamento para impresoras 3D. Las impresoras 3D se utilizarán entonces para crear ayudas de montaje ergonómicas para los empleados, como tapones protectores o ayudas de prensado.

Los nuevos métodos de planificación virtual combinan la digitalización y la sostenibilidad. Por ejemplo, Audi pudo diseñar virtualmente por primera vez parte de los contenedores especiales utilizados para transportar los componentes más delicados del Audi e-tron GT. Esta aplicación de RV, que se puso a prueba en la planta de Neckarsulm, se utiliza ahora en todo el grupo y ayuda a conservar los recursos que antes se utilizaban para los prototipos de contenedores. Además, el Gran Turismo totalmente eléctrico es el primer vehículo de la marca de los cuatro aros que se fabrica completamente sin prototipos. Esto fue posible gracias a los escaneos tridimensionales, los procesos de aprendizaje automático y el uso de la realidad virtual, entre otras cosas. Todos los procesos de ensamblaje se probaron por primera vez de forma virtual, y ahora se están aplicando con éxito durante la fabricación de los modelos de producción. De este modo se ahorran prototipos físicos y también muchos viajes, ya que los métodos virtuales se utilizan ahora en todas las sedes y -no sólo en la época de la pandemia del coronavirus- permiten a los empleados trabajar digitalmente y en colaboración en un espacio virtual.

Biodiversidad – hábitats para plantas e insectos

Audi es miembro de la iniciativa “Biodiversidad en buena compañía” desde hace seis años y se compromete a conservar la diversidad biológica en todos sus emplazamientos. Esto incluye espacios naturales abiertos, fachadas verdes o biotopos de humedales. Como parte del programa “Década de la Biodiversidad de la ONU”, la empresa también participa en la conservación de la naturaleza más allá de sus propios límites corporativos. La Fundación Medioambiental Audi, creada en 2009, apoya proyectos medioambientales destinados a preservar la biodiversidad.

Desde 2014, varias colonias de abejas utilizan el complejo de Neckarsulm para producir miel. Cada año se plantan más de 35 especies de flores en antiguas zonas de hierba para proporcionar hábitat y fuentes de alimento a importantes polinizadores y otros insectos. Este año los alumnos de formación profesional en carrocería y fabricación de vehículos construyeron 17 hoteles para insectos y los instalaron en la zona. Las estructuras de madera sirven de refugio a varias especies de insectos. Los alumnos velan por el bienestar de sus huéspedes desde entonces.

En la sección suroeste del complejo de Neckarsulm, Audi también ha construido una torre dedicada a la anidación para las golondrinas. En 2019 se instalaron nuevas cajas de anidación para vencejos en el puente transportador entre dos edificios, y en la chimenea del taller de pintura existe desde 2003 un lugar habilitado para la anidación de halcones peregrinos.

Al habla con Fred Schulze, y con Achim Diehlmann – “El cambio climático nos afecta a todos”

El éxito empresarial está estrechamente relacionado con la adopción de la responsabilidad social. La marca de los cuatro aros está convencida de ello y actúa en consecuencia. En esta entrevista, Fred Schulze, director de la fábrica de Audi en Neckarsulm, y Achim Diehlmann, responsable de protección medioambiental de la empresa, hablan de la sostenibilidad como motor del cambio, y de la responsabilidad de la empresa con la comunidad y la naturaleza.

Sr. Schulze, ¿qué papel desempeña la sostenibilidad en la sede de Audi en Neckarsulm?

Fred Schulze: La sostenibilidad tiene un papel muy importante aquí y en todos los ámbitos de la vida. Los clientes y empleados de todo el mundo esperan, con razón, que nos comprometamos al máximo para que nuestros procesos de producción sean lo más respetuosos posible con el medio ambiente. En particular, como fabricante de vehículos premium, se espera que marquemos la pauta de la movilidad ecológica del futuro mediante el uso de tecnologías sostenibles. Pero también considero que contribuir a un futuro habitable es nuestro impulso interior, nuestra actitud, nuestra mentalidad.

¿Cuáles son los objetivos de sostenibilidad para la fábrica y qué están haciendo específicamente para conseguirlos?

Schulze: Nuestro principal objetivo es evitar el impacto medioambiental siempre que sea posible. Esto empieza con el material de embalaje de los componentes de nuestros vehículos. Las buenas ideas son siempre bienvenidas: nuestros colegas de los equipos de montaje del A6 y el A7, por ejemplo, están probando actualmente un ciclo que utiliza la impresión 3D para convertir los residuos de plástico en ayudas para el montaje. “Evitar y reducir” es también nuestro principio directriz en lo que respecta a las emisiones. En este proceso cada gramo de carbono cuenta. Desde principios de 2020 nos abastecemos de energía verde en toda la planta. En cuanto al uso del agua, actualmente estamos testando una planta piloto para un ciclo cerrado de agua con la central de tratamiento de aguas residuales vecina, que está operada por AZV Unteres Sulmtal, con la esperanza de que en el futuro ya no necesitemos extraer agua del río Neckar. El año que viene iniciaremos el proceso de instalación de un nuevo sistema de suministro de agua.

Sr. Diehlmann, el objetivo de Audi es que el centro de Neckarsulm sea neutro en carbono para 2025. ¿Qué cambios habrá que hacer para conseguirlo?

Achim Diehlmann: Hemos organizado nuestras actuaciones en cuatro niveles jerárquicos, con la eficiencia energética a la cabeza. Estamos modernizando nuestros sistemas para reducir el consumo de energía. El segundo nivel se centra en el autoabastecimiento: en la planta de cogeneración de energía de Böllinger Höfe, por ejemplo, confiamos en el biogás para generar calor neutro en carbono. El tercer nivel jerárquico se centra en la obtención de energía eléctrica y térmica. Así, en Neckarsulm, nos abastecemos exclusivamente de energía verde. El cuarto nivel se refiere a las emisiones de carbono que no podemos reducir o evitar. Aquí se incluyen también los procesos ajenos a la producción, como las pruebas con combustibles específicos para ciertas regiones de nuestros mercados en todo el mundo o los envíos hacia y desde el centro. Compensamos estas emisiones mediante créditos de carbono a partir de proyectos certificados.

Usted es el responsable de la protección del medio ambiente en la empresa y el Director del programa medioambiental Mission:Zero. ¿Qué importancia ha adquirido la protección del medio ambiente en Audi en los últimos años?
Diehlmann: La importancia de la sostenibilidad ha aumentado enormemente. Audi ya va mucho más allá del simple cumplimiento de los requisitos legales de protección del medio ambiente. A través de nuestro programa medioambiental Mission:Zero estamos aplicando de forma proactiva medidas en todos los centros de Audi en los ámbitos de la descarbonización, el uso del agua, la eficiencia de los recursos y la biodiversidad. Mission:Zero ha logrado la aceptación dentro de la empresa y también ha desbloqueado fondos para apoyar medidas como la conservación de la biodiversidad. Las praderas de flores o los lugares de anidación benefician, sobre todo, a los animales que rodean nuestras instalaciones y compensan a los humanos de otras maneras, como la mejora de la calidad de vida y del entorno de trabajo.

Sr. Schulze, su carrera en Audi le ha llevado hasta China, pero Neckarsulm es su hogar. ¿Siente que tiene una responsabilidad especial con la gente y el medio ambiente de la región?

Schulze: Después de pasar un tiempo en el extranjero, uno mira su casa con nuevos ojos. Veo lo mucho que hemos conseguido aquí. La gente se preocupa por el medio ambiente, muchos son personalmente activos en la promoción de la sostenibilidad, y disfrutan del aire limpio. Me gustaría poner mi granito de arena para que las generaciones que vengan después de nosotros también puedan vivir aquí en armonía con la naturaleza. Los ambiciosos objetivos de sostenibilidad de Audi demuestran que estamos en el buen camino. Pero incluso China ha adoptado ya normas medioambientales muy estrictas para las fábricas. El cambio climático nos afecta a todos, y sólo podremos limitar sus efectos si todos los países se toman en serio la protección del medio ambiente.

Sr. Diehlmann, ¿qué podemos hacer cada uno de nosotros para promover la sostenibilidad?

Diehlmann: Todos somos responsables de la naturaleza y de nuestra huella de carbono personal. Me gustaría que en el futuro más personas se dieran cuenta de ello y vivieran en consecuencia. En mi familia, por ejemplo, evitamos los productos desechables siempre que es posible. No llevamos a nuestros hijos al colegio en coche, a veces dejamos el cortacésped en el garaje durante un tiempo y permitimos que el jardín sea más respetuoso con los insectos. En definitiva, son pequeños cambios de comportamiento que tienen un efecto duradero si un gran número de personas se lo toma en serio.

Cargando...
Load next