Michelin ya está listo para el Campeonato del Mundo de MotoGP. La cuenta atrás ha comenzado y aterrizamos en la República Checa para la décima prueba del calendario con el Monster Energy Grand Prix České Republiky.
La habilidad que posee Michelin de producir gomas para todas las monturas y estilos de pilotaje, sumado a la búsqueda continua de los compuestos más fiables para las distintas pistas, propicia que vivamos uno den los Mundiales más apretados de la historia. Llegamos a Brno con Marc Márquez (Repsol Honda Team), Maverick Viñales (Movistar Yamaha MotoGP), Andrea Dovizioso (Ducati Team) y Valentino Rossi (Movistar Yamaha MotoGP) separados por tan sólo 10 puntos.
La marca de neumáticos francesa proveerá los Michelin Power Slick personalizados para la abrasión media del circuito, para sus zonas de frenadas fuertes, para las áreas de aceleración y para la naturaleza ondulada del trazado (cambios de elevación de más de 70 metros entre los puntos más altos y más bajos del circuito). Los neumáticos delanteros blandos, medios y duros serán simétricos, mientras que los compuestos traseros serán asimétricos: pese a que es un circuito equilibrado (6 curvas de izquierdas por 8 de derechas), los virajes de derechas son más exigentes por lo que la parte derecha tendrá un compuesto más duro.
El circuito Masaryk, más conocido como Autodromom Brno, está situado al sureste del país a 200 km. de Praga, cerca de las fronteras con Austria, Eslovaquia, Hungría y Polonia. Teniendo en cuenta su ubicación, Brno suele acoger al Mundial con un clima cambiante (al igual que el año pasado), por ello, las MICHELIN Power Rain estarán disponibles en compuesto blando y medio para los neumáticos delanteros y traseros. Tan sólo el neumático trasero será asimétrico con un compuesto más duro en la parte derecha.
La acción regresará el viernes 4 de agosto con las primeras dos sesiones libres. La carrera se disputará a las 14:00 hora local, (13.00hrs BST, 12.00hrs GMT) el domingo 6 de agosto.
Piero Taramasso, responsable de Michelin Motorsport en Moto: “Es genial volver a la acción después de estas cortas vacaciones a media temporada, aunque hemos seguido trabajando y analizando los datos de las nueve primeras carreras y diseñando las estrategias para el resto del año, comenzando con la de Brno. Este es, sin duda, un circuito complejo y como siempre una gran prueba para los neumáticos. Es una pista ancha con muchos cambios de nivel y una amplia variedad de curvas. Las zonas de descenso con duras frenadas suponen una carga adicional en la parte delantera y, a continuación, se necesita un agarre trasero consistente y estable para forzar la aceleración de las motos en el asfalto. Esto supone un montón de estrés y esfuerzos en los neumáticos delantero y trasero, por lo que tenemos que disponer de una goma que puede hacer frente a casi todo. El ano pasado la carrera fue sobre mojado, pero antes de eso la pista estaba seca y vimos unas vueltas muy rápidas, nos gustaría que todo fuera bien este fin de semana para poder mostrar lo que los ‘slicks’ pueden hacer a lo largo de una carrera así y proporcionar a los pilotos el agarre y la consistencia que necesitan para dar un buen espectáculo a la gran cantidad de público que se espera en Brno”.