El indicador subió así hasta los 94.1 puntos, después de haber subido 0.5 puntos en diciembre y de haber permanecido sin cambios en noviembre.
"Pese a la persistente debilidad de los nuevos pedidos del sector manufacturero y las expectativas de los consumidores, las mejoras en los permisos de construcción y los componentes financieros ayudaron a impulsar este índice en enero", afirmó el economista de The Conference Board Ataman Ozyildirim en un comunicado.
Según el experto, el segundo avance consecutivo del índice de tendencia futura apunta hacia una "lenta pero sostenida expansión de la actividad económica en el corto plazo".
Por su parte, el también economista de esa entidad de análisis Ken Goldstein aseguró que este indicador señala "que la economía subyacente permanece relativamente en forma pero todavía muy lenta".
Goldstein recordó que el crédito se ha reactivado, principalmente gracias a la demanda de préstamos para la compra de automóviles, aunque el "factor más positivo" sigue siendo el mercado inmobiliario, que "probablemente mejorará a lo largo de la primavera, ofreciendo algo de impulso al crecimiento en el mercado laboral y la economía en general".
En cualquier caso, advirtió que el "mayor riesgo" al que se enfrenta la economía estadounidense es el impacto de los recortes al gasto público, en concreto los masivos recortes automáticos programados para el próximo 1 de marzo si el Congreso de Estados Unidos no llega antes a un acuerdo.
"Pese a la persistente debilidad de los nuevos pedidos del sector manufacturero y las expectativas de los consumidores, las mejoras en los permisos de construcción y los componentes financieros ayudaron a impulsar este índice en enero", afirmó el economista de The Conference Board Ataman Ozyildirim en un comunicado.
Según el experto, el segundo avance consecutivo del índice de tendencia futura apunta hacia una "lenta pero sostenida expansión de la actividad económica en el corto plazo".
Por su parte, el también economista de esa entidad de análisis Ken Goldstein aseguró que este indicador señala "que la economía subyacente permanece relativamente en forma pero todavía muy lenta".
Goldstein recordó que el crédito se ha reactivado, principalmente gracias a la demanda de préstamos para la compra de automóviles, aunque el "factor más positivo" sigue siendo el mercado inmobiliario, que "probablemente mejorará a lo largo de la primavera, ofreciendo algo de impulso al crecimiento en el mercado laboral y la economía en general".
En cualquier caso, advirtió que el "mayor riesgo" al que se enfrenta la economía estadounidense es el impacto de los recortes al gasto público, en concreto los masivos recortes automáticos programados para el próximo 1 de marzo si el Congreso de Estados Unidos no llega antes a un acuerdo.