En los seis primeros meses del año, el retroceso fue del 14.4 por ciento (-13.7 por ciento en número de días comparables) en un semestre en el que se matricularon en Francia 1,048,298 vehículos, de los que 561,865 fueron de marcas galas y 486,433 fueron coches extranjeros.
La caída de las ventas afectó especialmente a los fabricantes franceses, tanto en el mes de junio (-2.2 frente al avance del 0.7 de los constructores extranjeros) como en el conjunto del semestre (-17.7 por ciento frente al 7.2 por ciento de las marcas foráneas).
En junio, el líder de ventas en Francia fue el grupo PSA Peugeot Citroën, que con todas sus marcas comercializó en Francia 137,640 vehículos y retrocedió un 10 por ciento, frente a los 62,125 automóviles vendidos por Renault, que avanzó un 9.3 por ciento.
En ese mismo mes, las marcas extranjeras lograron, sin embargo, mejorar sus ventas respecto al mismo período de 2011, gracias al empuje de los constructores asiáticos.
Así, el grupo Hyundai mejoró un 50.2 por ciento respecto a junio de 2011, con 6,955 coches vendidos, Toyota avanzó un 27.2 por ciento con 7,192 automóviles y las ventas de Nissan se incrementaron un 25.8 por ciento al colocar 9.188 coches en el mercado.
Sin embargo, la mayoría de las marcas europeas y estadounidense perdieron terreno, con caídas en junio para Ford (-18.8 por ciento y 11,679 coches), General Motors (-4.3 por ciento y 13,890 coches), Fiat (-9.6 por ciento y 11,714 coches), Mercedes (-11.3 por ciento y 7,421 coches) y BMX (-3.2 por ciento y 6,446 coches).
Solo progresó Volkswagen, que es, no obstante, el grupo automovilístico extranjero con más éxito en Francia y vendió 108,745 vehículos, lo que supone un avance del 0.7 por ciento respecto a junio del pasado año.
En el conjunto del primer semestre del año, también las marcas extranjeras registraron un resultado de ventas mejor al de las francesas, en términos relativos, aunque ambos segmentos perdieron terreno frente a 2012, cuando los conductores podían aún beneficiarse de la prima de desguace y abaratar el cambio de coche.
Entre enero y junio, las ventas de PSA Peugeot Citroën cayeron un 20 por ciento hasta los 700,857 vehículos vendidos, mientras que las de Renault se contrajeron un 15.1 por ciento hasta los 365,612 coches comercializados. En conjunto, retrocedieron un 17.7 por ciento.
En el mismo período, las marcas extranjeras dejaron de vender un 7.2 por ciento en Francia, con caídas para Volkswagen (-3.6 por ciento y 149,312 coches), Ford (-14.4 por ciento y 65,911 coches), General Motors (-17.4 por ciento y 61,198 coches), Fiat (-19.1 por ciento y 60,384 coches), Toyota (-6.7 por ciento y 36,837 coches) y Mercedes (-2.7 por ciento y 36,010 coches).
En cambio, vendieron más en el primer trimestre de 2012 que en el de 2011 Nissan (+4.6 por ciento y 43,426 por ciento), BMW (+1.4 por ciento y 34,858 coches) e Hyundai (+28.7 por ciento, 31,581 coches).
En el primer semestre de 2011, las ventas de coches en Francia habían caído un 12.6 por ciento con respecto a los primeros seis meses de 2010.