El presidente de la compañía, Manuel Ferreira de Oliveira, reconoció hoy al presentar sus resultados que aunque son buenos en relación con años anteriores el descalabro sufrido en 2009 por el negativo contexto económico hace que ese ejercicio no sea una referencia adecuada de comparación.
Galp, que opera en Portugal, España, Brasil, Venezuela y Angola, obtuvo resultados líquidos de 174 millones de euros en el primer semestre de este año frente a los 73 que obtuvo en el mismo periodo de 2009.
Los beneficios de este semestre, según Ferreira de Oliveira, provienen sobre todo del aumento de precio del petróleo -con una media de 77.3 dólares por barril- y de la mayor producción de crudo sumada a un aumento del margen de refinación, que en la empresa lusa subió de 2 a 3 dólares por barril este año.
En el primer semestre de 2010 las exportaciones de Galp, que vendió petróleo a medio centenar de países, equivalen al 80 por ciento del volumen total de 2009, en el que descendieron por los efectos de la crisis.
Según el presidente de la compañía en 2010 ha habido una mejoría mundial de la demanda de petróleo aunque tanto en España como en Portugal, principales mercados de Galp, se mantiene una caída del 3 por ciento.
Ferreira de Oliveira destacó la buena marcha de sus proyectos de explotación de crudo en Tupí (Brasil) y Tombua Landana (Angola) y sobre todo de este último, responsable del grueso del aumento de producción de Galp.
Sobre el área de electricidad, el presidente de la compañía lusa advirtió que no se avanzará con el proyecto de la central de ciclo combinado del puerto luso de Sines si el gobierno portugués no cambia la legislación para que se remunere la actividad de las nuevas centrales, como sucede en España.
Sin remuneración de potencia, que en Portugal sólo tienen las centrales antiguas, no se puede competir en el mercado ibérico, aseguró el ejecutivo de Galp al subrayar la dificultad de afrontar, en este escenario, los 500 millones de euros que costará esa futura central de ciclo combinado, de 400 megawatios.
Los resultados anunciados hoy por Galp sitúan su EBITDA en 454 millones, con un aumento del 58.7 por ciento y una variación de 168 millones respecto al primer semestre de 2009.
La producción de crudo superó los 191,000 barriles diarios en cuanto la distribución de productos petrolíferos se vio influenciado por un aumento de actividad en España, donde Galp cuenta casi con la mitad de sus 1,443 estaciones de servicio.
En total su área de refinación y distribución registró una mejora del 266 por ciento comparada con el periodo homólogo de 2009 y la venta de productos creció un 3 por ciento.
En el área de gas natural las ventas aumentaron el 4 por ciento, a 2,284 millones de metros cúbicos y registraron una mejora de resultados del 31 por ciento, hasta 93 millones de euros.
La inversión de Galp durante los primeros seis meses de este año sumó 479 millones dedicados sobre todo a los proyectos de reconversión de refinerías, y se concentró en un 60 por ciento en el segundo trimestre.