En un informe presentado al regulador bursátil de Hong Kong, la compañía cuantificó su ganancia en 115,326 millones de yuanes (18,543 millones de dólares, 14,367 millones de euros) y sus ingresos en 2.2 billones de yuanes (353,700 millones de dólares, 274,100 millones de euros), estos últimos un 9.6 por ciento más comparado con el ejercicio fiscal 2011.
El aumento de los ingresos se debió principalmente al incremento de los volúmenes de venta y de los precios de productos como el gas natural, la gasolina o el diesel en China.
Concretamente, las ventas en China de gas natural crecieron un 13.4 por ciento, las de gasolina un 7.8 por ciento y las de diesel un 3 por ciento.
Algunas partidas de gasto, sin embargo, aumentaron en mayor medida, como es el caso de las compras (14.9 por ciento), especialmente las que se llevaron a cabo en la adquisición de gas natural para satisfacer la demanda creciente del mercado doméstico.
Las importaciones de gas natural se dispararon un 31.1 por ciento en 2012 y alcanzaron los 42,500 millones de metros cúbicos, la mayoría procedentes de países del Asia central.
Dos de las cuatro líneas de negocios registraron pérdidas en 2012, la de refinería y químicos con 43,511 millones de yuanes (7,000 millones de dólares, 5,420 millones de euros), y la de gas natural, con 2,110 (339 millones de dólares, 262 millones de euros).
Estas pérdidas, sin embargo, se compensaron por las ventas de productos y especialmente por el segmento de exploración y producción, que sigue siendo el principal motor de beneficios de la petrolera con 214,955 millones de yuanes (34,562 millones de dólares, 26,778 millones de euros).
Con todo, el resultado de explotación (Ebit) se situó en 174,519 millones de yuanes (28,060 millones de dólares, 21,740 millones de euros), un 4.3 por ciento menos que en 2011.
La petrolera también atribuyó la bajada del beneficio a la ralentización de la economía china y a los controles del gobierno, que limitan la capacidad de la compañía de traspasar la volatilidad de los precios del petróleo al consumidor, una medida que Pekín impone para contener la inflación.
En cuanto a las ventas de productos derivados del crudo, como la gasolina, el diesel o el queroseno, PetroChina registró una cuota de mercado del 39.3 por ciento del total nacional, una décima más que el año anterior, e informó que cuenta con 19,296 estaciones de servicio en todo el país.
Respecto a su actividad en el extranjero, la compañía detalló que un 32 por ciento de sus ingresos ya proceden de sus proyectos fuera de China.
En este ámbito, las inversiones de la compañía se incrementaron un 23.4 por ciento en 2012 debido a la construcción de redes de tuberías de petróleo y gas, además de por la adquisición de nuevos activos en Canadá y el desarrollo de dos proyectos en Irak.
En 2013, PetroChina "centrará" su exploración de reservas de gas y petróleo en Oriente Medio, Asia Central, América y Asia-Pacífico, dice el informe anual.
El presidente de la compañía, Zhou Jinping, aseguró que se espera "una mayor demanda energética en China y en el mundo", y que la estrategia de la empresa "se basará en los recursos, el mercado y la internacionalización".
El principal accionista de PetroChina es la Corporación Nacional de Petróleo de China (CNPC), de propiedad estatal, con el 86.3 por ciento de las acciones.
PetroChina, que ha anunciado un dividendo de 0.13 yuanes por acción (2 centavos, 1.6 céntimos), cotiza en los parqués de Hong Kong, Shanghái y Nueva York, y su marca está considerada la novena de más valor del país asiático.