Este modelo fue expuesto en el reciente Salón del Automóvil de Pekín y es producto de la tecnología que este fabricante chino adquirió a la marca sueca, actualmente en concurso de acreedores (suspensión de pagos) y en negociación para su posible venta.
BAIC, asimismo, planea lanzar una línea completa de productos basados en la plataforma del Saab 9-5 en los próximos años, entre los que se encuentra una versión eléctrica.
Entre las características del modelo figuran cotas como su longitud de 4.860 metros, su anchura de 1.820 y su altura de 1.641, aparte de equipar un motor gasolina de 2.0 litros de cilindrada.
BAIC, con sede en Beijing, es una empresa de propiedad estatal y participa en el capital de otros fabricantes como Hyundai y Daimler.