A pesar de enfrentarse al peor entorno económico desde la Gran Depresión, Shell Lubricantes cerró el año 2009 con un aumento de su cuota de mercado al 13.4 por ciento en comparación con 12.7 por ciento en 2008, al tiempo que amplió su ventaja al 2.5 por ciento sobre su más cercano competidor, frente al 1.6 por ciento del año anterior.
Estas cifras son especialmente significativas, dado que en 2009 la demanda mundial de lubricantes disminuyó el 8.4 por ciento, alcanzando los 35 millones de toneladas.
El informe de Kline muestra que, a pesar de las difíciles condiciones, Shell continuó su crecimiento en el mercado de lubricantes y consiguió su posición de liderazgo global, gracias al resultado de una estrategia coherente y al desarrollo de tecnologías de vanguardia.
Según Kline, el impacto de la recesión mundial ha sido menos elevado en la zona de Asia-Pacífico, que sigue registrando un aumento de volumen de negocio.
Shell ha crecido en China consiguiendo un 11 por ciento de cuota de mercado, y ha reforzando de esta manera su liderazgo como el mayor proveedor internacional.
En mercados en alza como Indonesia, Shell es un protagonista importante entre las compañías petroleras internacionales. Kline también señala que Estados Unidos, el mayor consumidor de lubricantes, fue de los más afectados por la recesión económica, peses a lo cual Shell ha mantenido su posición de liderazgo con un 11.6 por ciento de cuota de mercado.
La consultora indica que, en el actual paisaje competitivo, la experiencia tecnológica ha sido, y será cada vez más, un importante diferenciador entre los proveedores de lubricantes.
Este es uno de los puntos fuertes de Shell, que lleva más de 70 años de innovación y liderazgo tecnológico mediante elevadas inversiones en investigación y desarrollo.
Shell ha iniciado recientemente las obras para la construcción de un centro de servicios técnicos en Zhuhai, China. En cuanto las operaciones se inicien en 2011, el centro proporcionará una amplia gama de lubricantes y servicios a clientes chinos de los sectores del automóvil, del transporte marítimo así como de la industria energética en general.
Shell ha desarrollado también asociaciones con los mayores fabricantes de equipos, con clientes e instituciones, en proyectos que le permiten probar sus productos en algunas de las condiciones más exigentes.
Su objetivo de satisfacción al cliente, ha permitido a Shell ganarse la confianza de muchos líderes del mercado en sus respectivos sectores.
A comienzos de este año, Shell y Hyundai Motor Company, cuarto fabricante mundial de automóviles, anunciaron la renovación de su acuerdo mundial sobre lubricantes, haciendo que Shell sea su proveedor de referencia por otros cinco años.