Para recibir la autorización, la planta de Isuzu Motors de México tuvo que adecuar sus instalaciones para cumplir con todos los protocolos de higiene definidos por el gobierno federal. Entre las medidas implementadas se encuentra la instalación de dispensadores automáticos de gel antibacterial en toda el área productiva y de oficinas, un módulo de detección de temperatura corporal para todos los empleados y visitantes a la planta, la colocación de tapetes con solución desinfectante en todos los accesos de la planta, así como separación física entre todas las estaciones de trabajo.
Además de la inversión en las medidas sanitarias, la capacitación y la comunicación jugarán un papel fundamental en este retorno de actividades. Dentro de la planta se implementó un sistema de comunicación para recordar al personal de la planta, proveedores y visitantes, los protocolos de protección y distanciamiento social. Para el personal que labora en la planta, también habrá un programa de capacitación que los mantendrá actualizados acerca de las políticas y procedimientos emitidos por la Secretaria de Salud.