Estas ventas y crecimiento suponen, además, para el grupo importador español la consolidación como socio automotriz de referencia en el eje comercial Asia-Latinoamérica, ya que SK Bergé comercializa varias marcas asiáticas en el área latinoamericana.
Los resultados del grupo se presentaron hoy en Madrid por Fernando D'Ornellas, consejero delegado del grupo Bergé, del que forma parte Bergé Automoción, que, a su vez, forma sociedad para Chile, Argentina, Perú y Colombia, con la empresa chilena Sigdo Koppers (SK).
El consejero delegado, que calificó de muy bueno el año en Latinoamérica, destacó la trayectoria de los mercados en los que opera SK Bergé, con un crecimiento del 69 por ciento en Chile, un 58 por ciento en Perú y un 56 por ciento en Argentina, a la espera de los resultados que proporcione Colombia, un mercado en el que el grupo acaba de iniciar sus operaciones con las marcas Chrysler, Jeep, Dodge, Ram y Mopar.
La previsión de SK Bergé para este ejercicio es de un nuevo crecimiento de las ventas, aunque no en el porcentaje del ejercicio 2010, estimado en torno al 20 por ciento.
En los mercados internacionales en los que opera Bergé Automoción, las ventas en 2010 sumaron 56,407 unidades, una cifra que supone un crecimiento de la actividad del 54 por ciento.
En España y Portugal, las ventas el pasado año fueron de alrededor de 10,000 unidades, cifra similar a la del ejercicio 2009, una vez excluidas las ventas de Hyundai, marca que hasta el pasado año importó Bergé para el mercado español.
No obstante, en 2010, Bergé Automoción firmó con Hyundai un acuerdo para comercializar en España los vehículos industriales del fabricante coreano, con el proyecto de desarrollar, en los próximos tres años, una red de distribución y una relevante cuota de mercado, ya que los vehículos industriales de Hyundai se situarán, en precio, un 10 por ciento por debajo del de sus competidores.
En relación al mercado español es deseo de Bergé Automoción recuperar en 3 ó 4 años niveles de ventas de entre 30,000 y 40,000 unidades, con la llegada de nuevas marcas, entre ellas las chinas MG y BYD, especializada en vehículos híbridos y eléctricos.
Las operaciones de la división de automóvil del grupo Bergé y Cia supusieron una facturación cercana a los 1,200 millones de euros, de los que cerca de 900 correspondieron al mercado latinoamericano.
SK Bergé, que ha estado operando en el mercado mexicano con Fiat espera regresar a aquel país en 2013, sin concretar con qué marca, al igual que intentará su entrada en el mercado Brasileño.
La vocación de Bergé Automoción es la de intermediación entre Asia y Latinoamérica, especialmente desde China, país en el que Bergé mantiene un equipo de trabajo desde hace más de ocho años.
Fernado D'Ornellas explicó que desde hace tiempo su grupo comprendió que China, más que inversores, necesita de socios para la exportación por lo que el grupo español ha propuesto a la industria automovilística del país asiático convertir a España en un "hub" o centro de distribución de automóviles para Europa, al igual que con la banca china estudia programas de financiación de exportaciones.
En relación a las marcas con las que actualmente trabaja el grupo Bergé -representa a 26 marcas entre distribución y retail-, el consejero delegado mencionó especialmente a Infiniti, con la que empezará próximamente en Chile.
Respecto a Tata, importada para el mercado español, el consejero dijo que entra dentro de lo posible que se replantee el acuerdo, porque no se han cumplido las expectativas depositadas en la marca india.