Izquierda mexicana hará protesta en cumbre a la que asistirá Obama

Izquierda mexicana hará protesta en cumbre a la que asistirá Obama

El izquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD) de México anunció ayer que hará una protesta pacífica el próximo 19 de febrero durante la cumbre del Tratado de Libre Comercio para América del Norte (TLCAN), a la que asistirá el presidente estadounidense, Barack Obama.

El dirigente del PRD en el Estado de México, Juan de la Rosa, dijo que se espera que más de 10.000 militantes de su partido asistan a la protesta civil pacífica en defensa de la soberanía nacional en la ciudad de Toluca, sede de la cumbre trilateral, en la que también estará el presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, y el primer ministro de Canadá, Stephen Harper.

Por su lado, el secretario general del PRD, Alejandro Sánchez Camacho, informó que este viernes su partido hará llegar una carta abierta a las embajadas de Estados Unidos y Canadá en la que pedirán una reunión con los líderes de ambas naciones en la víspera de la Cumbre.

El objetivo de la reunión solicitada, señaló Sánchez, es "hacerles saber que la reforma energética (del gobierno mexicano) no es infalible, ya que hay millones de mexicanos que desean que se escuche su voz mediante la consulta popular en contra de la iniciativa de Enrique Peña Nieto de entregar nuestros recursos energéticos".

El PRD es uno de los más críticos de la reforma energética que impulsó el gobierno de Peña Nieto, que acaba con los monopolios del sector y los abre a la inversión extranjera.

"Hay un movimiento social nacional que estamos pidiendo que se nos consulte sobre la venta del petróleo, no vamos a intentar entrar al primer cuadro de la ciudad, todas nuestras acciones serán pacíficas, y desde este fin de semana se realizará una campaña de difusión para promover dichas acciones", declaró De la Rosa.

El partido de izquierda también es crítico del TLCAN, del que considera que tras 20 años de haber entrado en vigencia sólo ha beneficiado a compañías transnacionales y los inversionistas.

"Ha sido todo un éxito para las grandes empresas y la gente rica. Sus consecuencias negativas han sido particularmente severas para el pueblo y el campo mexicano, pero también han perjudicado a trabajadores y el medioambiente en los otros dos países", indicó el líder perredeista.

"El TLCAN ha restado soberanía a los gobiernos democráticos; ha contribuido a la destrucción ambiental; ha aumentado la migración de mexicanos hacia las ciudades y hacia el Norte; y ha incrementado la dependencia alimentaria", agregó.

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