"Steve Moore, un gran economista a favor del crecimiento y una verdadera buena persona, ha decidido retirarse del proceso de la Fed", indicó Trump en su cuenta de Twitter.
La posibilidad de que Moore formara parte del banco central estadounidense había provocado inquietud y oposición dentro del propio Partido Republicano, al considerar que no era apto para el cargo.
Aunque no había sido nominado formalmente por Trump, el mandatario había reconocido que consideraba al comentarista televisivo como uno de los candidatos para ocupar una de las siete plazas que componen la junta de gobernadores de la Fed.
En una carta difundida por la cadena de televisión CNBC, Moore, de 59 años, explicó que su decisión ha estado motivada por "los continuos ataques" contra su persona, en referencia a las informaciones aparecidas en medios de comunicación sobre su difícil divorcio y con comentarios suyos en el pasado minusvalorando a las mujeres.
Se trata del segundo revés que el presidente se lleva en el banco central, después de que en marzo el republicano Herman Cain también diese marcha atrás por falta de apoyos, dado que varios senadores anunciaron que no respaldarían su nominación.
Los miembros de la junta de la Fed deben ser aprobados por mayoría en el Senado.
El retiro de las candidaturas de Moore y Cain a la junta de la Fed frena el esfuerzo de Trump por instalar aliados políticos en el banco central.
El mandatario ha criticado fuertemente al organismo regulador y a su presidente, Jerome Powell, en los últimos meses por haber subido los tipos de interés hasta en cuatro ocasiones en 2018, rompiendo así con la tradición que marcaba que el presidente no comentaba las decisiones de la Fed para mantener su espíritu independiente.
Asimismo, ha insistido en que la Fed debería bajar los tipos de interés, actualmente entre el 2.25 y 2.5 por ciento.
En la reunión de esta semana, sin embargo, el banco central mantuvo los tipos sin cambios y el propio Powell subrayó la independencia del organismo frente a cuestiones políticas.