Kankkunen condujo este Bentley con tracción en las cuatro ruedas, motor de 6 litros y 12 cilindros que, en línea con la estrategia de la compañía sobre emisiones, utiliza biocombustible.
El anterior récord de velocidad en superficie congelada data del 2007, cuando un Bentley Continental GT alcanzó las 199.83 millas por hora (321.6 kilómetros por hora), en el mismo lugar.
Con la ayuda de los ingenieros de Bentley, Kankkunen superó el reto de temperaturas inferiores a los 30 grados centrigrados, así como ráfagas de viento que afectaron el trayecto de 16.5 kilómetros, sobre una capa de hielo de solo 27 pulgadas de grosor.
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El récord se logró en una distancia de 1,000 metros y la velocidad fue certificada por oficiales de la Policía Finlandesa de Tráfico. El nuevo récord se basó en el promedio de dos intentos en dirección opuesta, según las especificaciones Libro de Récords Guinness.
"La última vez que lo intenté, me quedé en las 200 millas en un Continental GT. Cuando supe del nuevo Supersports sabía que podría romper el récord. Esta vez los 600 caballos de fuerza del motor, la transmisión Quickshift y el sistema de tracción en las cuatro ruedas, fue la combinación perfecta para lograrlo", dijo Kankkunen.
Tal como sucedió con el récord anterior con el Continental GT el auto usado solo fue modificado en forma mínima, con una barra de seguridad en la cabina para proteger al piloto y ruedas para nieve Pirelli SottoZero II 275/40R20, spoilers delanteros y traseras para lograr más estabilidad, además de una estructura para un paracaídas unido a la defensa trasera para la frenada final.
Bentley fabricará solo 100 unidades del Bentley extremo y será exhibido por primera vez en el Salón del Automóvil de Ginebra.