En el i8 la marca alemana combina un motor eléctrico de 131 caballos en el eje delantero con uno de gasolina de 1.5 litros y tres cilindros de 231 caballos en el trasero. El vehículo 2+2 pasa de cero a 100 km/h en 4.4 segundos, con una velocidad punta de 250 km/h.
La baterías de iones de litio hacen posible que tenga una autonomía plenamente eléctrica de hasta 37 kilómetros a una velocidad máxima de 120 km/h. Especialmente reducido es el consumo de combustible: 2.1 litros a los 100 kilómetros (Emisiones de CO2 de 49 g/km).
Como está hecho sobre todo de fibra de carbono, apenas pesa 1.5 toneladas. Un extra innovador es el de los primeros faros láser equipados de serie en un modelo.