El finlandés se mantuvo alejado de los problemas en las cálidas y polvorientas montañas de León. Al término de la jornada alcanzó una ventaja de 19 minutos y 05.9 segundos con su Skoda Fabia R5, después de añadir cinco victorias de tramo a su cuenta particular.
El trabajo más difícil para Suninen, que se situó noveno en la general del rallye, fue mantenerse centrado.
"He tenido algunos problemas de concentración. No es tan fácil pilotar con más precaución, es mejor hacerlo a gran velocidad. Podría rodar mucho más rápido, pero ahora no es el momento", explicó.
El polaco Hubert Ptaszek se colocó segundo con su Peugeot 208 T16. Después de sufrir varios problemas el viernes, Ptaszek rodó por la tarde solamente con tracción trasera en su coche. Aún así, mantuvo a raya a Max Rendina por 1 minuto y 32.2 segundos. El italiano tuvo problemas con la cremallera de la dirección de su Ford Fiesta R5 en los tramos vespertinos.
Nicolás Fuchs comenzó la jornada como segundo clasificado, pero tuvo que emplear un destornillador para sujetar la caja de cambios, dañada en el enlace a la primera especial. Sin embargo, la reparación de urgencia duró sólo unos pocos kilómetros. El peruano perdió después casi 30 minutos por ese motivo. Después, ganó cuatro tramo, a pesar de sufrir la rotura del sensor del turbo, y terminó la jornada en cuarto lugar.
Abdulaziz Al-Kuwari reemplazó a Fuchs en el segundo puesto, aunque por poco tiempo. En la siguiente especial arrancó una rueda delantera de su Fabia R5 y se tuvo que retirar. Su compatriota Khalid Al Suwaidi no se pudo reenganchar al no encontrarse del todo bien. Armin Kremer se retiró por segundo día consecutivo con daños en la suspensión trasera de su Fabia R5.