Las ventas fueron impulsadas por sus vehículos existentes, y de forma importante por la introducción de sus nuevos modelos de la serie 90. Teniendo un muy promisorio futuro por el impulso que le dará el S90 y los recientemente develados V90 Estate y V90 Wagon.
Del mismo modo, se informó que las utilidades generadas en el último año de operaciones de la compañía fueron de 773.7 millones de dólares, con un crecimiento en las ventas del 8 por ciento apoyado por el alto desempeño en todas sus regiones y por el fortalecimiento de su dirección ejecutiva y de su estructura corporativa.
“Ahora, con un exitoso 2015 detrás de nosotros, Volvo está a punto de entrar en la segunda fase de su transformación global, retomando su lugar en el segmento Premium. El futuro es prometedor y alucinante, Volvo Cars ha hecho una expansión de su presencia industrial y con el anuncio el año pasado de su nueva planta en Estados Unidos, tendremos una presencia industrial en nuestras tres regiones globales clave: Asia, Europa y América del Norte”, mencionó Håkan Samuelsson, presidente y director ejecutivo de Volvo Cars.
Los resultados obtenidos se deben a tres factores clave: primero, el aumento del volumen de autos, alcanzando más de medio millón de ventas por primera vez en la historia de la compañía; segundo, en un impulso comercial de la mano del extraordinario impacto del lanzamiento del XC90 y de un año récord en ventas para el XC60 que contribuyó en gran medida a estos logros. Y en tercer lugar, de un manejo financiero muy positivo en todas sus regiones, pese a los problemas económicos globales.