Lo anterior, se ve reflejado en más de un millón de puestos de trabajo directos, hablando únicamente del sector manufacturero, más los millones generados en ramas como agencias de distribuidores, talleres de reparación, entre otras. Ya que este importante sector, tiene un impacto en 252 ramas económicas, al ser el 4to productor de autopartes en el mundo, el 7mo en fabricación de vehículos ligeros, los cuales se exportan a más de 100 países, así como ser el principal exportador a nivel mundial de tractocamiones.
Nuestro país es el principal proveedor de autopartes para Estados Unidos, ya que el 36% del total de las importaciones de ese país, provienen de México, es decir casi 80 mil millones de dólares al cierre de este 2022, ya que la industria de autopartes mexicana, es la columna vertebral para la fabricación de vehículos en México y toda Norteamérica, con una producción para este año, superior a los 102 mil millones de dólares.
En los últimos 23 años, el Tratado de Libre Comercio entre México, Estados Unidos y Canadá, ha captado una inversión extranjera directa de $83,883 Millones de Dólares para nuestro país y con ello, la creación de más y mejores empleos para las familias mexicanas y en años recientes con la renegociación del llamado NAFTA, ahora T-MEC, se ha detonado el llamado nearshoring, lo que alienta aún más la llegada de nuevas inversiones, provenientes mayormente de Asia.
Es por esto la importancia, no solo de mantener el tratado de libre comercio entre México, Estados Unidos y Canadá, el llamado T-MEC, si no que tenemos que cuidarlo y mejorarlo, para que el sector automotriz, siga siendo el orgullo de las familias mexicanas que dependemos de él y de todos los mexicanos al ser el segundo pilar más importante para la economía de nuestro país, con un superávit de más de 88 mil millones de dólares, solo hablando del sector manufacturero automotriz; más grande que la entrada por divisas, el petróleo o el sector del turismo, juntos.