"Alemania necesita ser un país más abierto por su propio interés económico. Debemos ser atractivos para los trabajadores de gran categoría", afirmó al diario alemán Weser-Kurier.
En su opinión, Alemania debe ser un lugar de encuentro. "También por nuestra historia tenemos una obligación, debemos vivir con tolerancia y dar ejemplo", agregó con la mirada puesta en las manifestaciones del movimiento islamófobo alemán Pegida.