Eso es según una investigación encargada por la principal organización benéfica de seguridad vial independiente del Reino Unido, IAM RoadSmart, que reveló que hasta cuatro de cada diez conductores (42 por ciento) de los 1,004 automovilistas encuestados no conocen el límite legal de conducción bajo los efectos del alcohol en Inglaterra, Gales. e Irlanda del Norte. Esto representa potencialmente a más de 15 millones de los 35 millones de personas que poseen un permiso de conducir completo en el Reino Unido.
De manera alarmante, solo alrededor de uno de cada cinco (23 por ciento) de los encuestados conocía el límite correcto para conducir bajo los efectos del alcohol en Inglaterra, Gales e Irlanda del Norte: 35 microgramos por cada 100 mililitros de aliento. Mientras tanto, la conciencia en Escocia fue mayor con seis de cada diez (60 por ciento) de los encuestados que conocían el límite que actualmente se encuentra en 22 microgramos de alcohol en 100 mililitros de aliento.
Además, de los 585 que respondieron que conocían el límite de conducción bajo los efectos del alcohol para Inglaterra, Gales e Irlanda del Norte, menos de la mitad (40 por ciento) respondió correctamente.
Estos hallazgos han preocupado a IAM RoadSmart, que les recuerda a los conductores que, si bien pueden pensar que saben cuántas bebidas normalmente les darán una propina por encima del límite, esa cantidad en realidad podría fallar en una prueba de alcoholemia.
Neil Greig, Director de Políticas e Investigación de IAM RoadSmart, comentó: “Nuestra investigación destaca que todavía hay una verdadera falta de conciencia sobre cuánto alcohol es demasiado antes de que sea ilegal conducir. Nos gustaría recordar a los conductores que las características individuales como el peso corporal, el consumo de alimentos, el género y el metabolismo también tendrán un impacto en la lectura. Es por eso que siempre recomendaremos 'ninguno para el camino'”.
Los resultados de la encuesta también han llevado a la organización benéfica a reiterar su petición al gobierno de implementar un paquete más inteligente de medidas a más largo plazo para ayudar a reducir el número de conductores ebrios en las carreteras británicas. Esto incluye un límite más bajo para conducir bajo los efectos del alcohol en todo el Reino Unido, en línea con el límite de Escocia para reforzar el buen comportamiento, una vía rápida de máquinas de prueba en la carretera para liberar recursos policiales y cursos obligatorios de rehabilitación para conducir bajo los efectos del alcohol para todos los conductores atrapados en el límite.
Neil concluyó: “Un enjuiciamiento por conducir bajo los efectos del alcohol afectará el resto de su vida a través de la humillación pública, la pérdida de ingresos, la ruptura familiar y antecedentes penales, además de agregar un peligro real a nuestras carreteras. ¡En IAM RoadSmart estimamos que la última bebida que lo lleve por encima del límite podría costarle hasta £ 70,000! Si ese no es un pensamiento aleccionador, entonces nada lo es”.