La marca de neumáticos ha aportado el toque andaluz al sustituir las tradicionales gorras amarillas Dunlop, que habitualmente utilizan los vencedores de Moto2 y Moto3 en el pódium, por un sombrero de ala con los característicos laureles y el logotipo de la marca. Los pilotos de Moto3 no dudaron en subir al pódium caracterizados con los sombreros que Dunlop había preparado, y los de Moto2 se fotografiaron después con ellos.
La ciudad de Jerez y los miles de aficionados llegados de todo el país se han convertido así, en testigo de cómo los pilotos de Moto2 y Moto3 han luchado por subir al puesto más alto del cajón con luchas encarnizadas hasta la última curva.
La emoción ha sido doble, no sólo por la victoria conseguida sino también por haberla logrado en la Capital Mundial del Motociclismo. Algo que, sin duda, recordarán todos los que han presenciado uno de los espectáculos más emocionantes del mundo.