El nueve veces campeón mundial regresa al Campeonato Mundial de Rally de la FIA por primera vez en más de un año para conducir un Puma Rally1 respaldado por Red Bull en la apertura de la temporada en los Alpes franceses esta semana.
El trato del siete veces ganador del Monte para conducir el rally más famoso del mundo parecía complicado por su inclusión en el evento de maratón de Arabia Saudita en un BRX Hunter de Prodrive.
El equipo británico le dio permiso al francés para conducir en el WRC y luego todo se redujo a la logística de salir de Jeddah y regresar a Europa a tiempo.
Dakar terminó el viernes por la tarde, hora de Oriente Medio, y Loeb voló hacia el oeste el sábado por la mañana temprano. De vuelta en Ginebra, hubo tiempo para un cambio rápido antes de subirse a un helicóptero para cruzar los Alpes hasta el área de pruebas de M-Sport cerca de Gap.
“Nos alegramos mucho de verlo subirse al auto el domingo por la mañana”, dijo el director del equipo M-Sport Ford, Richard Millener.
“Todos han trabajado mucho para traer a Séb aquí, tanto en términos del acuerdo como para pasar de un evento muy grande a otro. Es muy profesional, sabía a lo que se enfrentaba cuando hablamos por primera vez de venir a Monte directamente desde Dakar.
“La prueba del domingo salió muy bien. No hubo problemas en absoluto y tampoco fatiga de él. Estaba fresco y lleno de energía, lo cual es genial. Ahora estamos concentrados en la semana que viene y en ver qué podemos hacer”.
“Creo que un podio para Sébastien sería un buen resultado”, dijo. “Tal vez sea demasiado optimista, o tal vez deberíamos recordar que este es el Rally de Montecarlo y cualquier cosa puede pasar, cualquiera puede ganar esto.
"Para ser justos con él, no ha tenido tanto tiempo en el coche como algunos de los otros chicos y, por supuesto, ha estado fuera del WRC durante más de un año".