El próximo 26 de marzo tendrá lugar un apagón global para reivindicar la importancia de cuidar el impacto al medio ambiente. La campaña de la ONG ecologista WWF “La Hora del Planeta” empezó en Sidney (Australia) hace cuatro años y desde entonces no han parado de unirse países a la causa. Lo que empezó siendo como una acción individual de un país se han convertido en un movimiento global en contra del cambio climático.
El apagón de las luces en la Hora del Planeta no pretende limitarse a una sola hora sino conseguir un compromiso individual y colectivo de los individuos para que modificando sus hábitos pueda contribuir al cuidado de nuestro Planeta.
Durante una hora miles de luces alrededor del mundo se apagarán para dar paso a la velas. Las ciudades apagarán las luces de sus monumentos más representativos.
Este símbolo y un compromiso con el Planeta que quiere conseguir mediante un pequeño gesto un gran cambio en la vida de los ciudadanos para cuidar el Planeta en el que vivimos.