La economía alemana retornó a la senda del crecimiento después de que en el último trimestre de 2011 se contrajera un 0.2 por ciento, la primera vez desde 2009.
"La economía alemana ha superado la fase de debilidad coyuntural del invierno. Tras un ligero retroceso en el último trimestre de 2011 la actividad económica ha vuelto a tomar impulso", dijo el ministro de Economía, Philipp Rössler, al comentar las cifras.
Rössler añadió que, pese a los riesgos que existen en Europa, la economía alemana sigue gozando de buena salud y resaltó el hecho de que el empleo sigue creciendo.
"Eso muestra la importancia de una política económica orientada hacia la estabilidad y la solidez de las finanzas públicas para un crecimiento sostenido", agregó.
En comparación con el primer trimestre de 2011, la economía alemana creció un 1.7 por ciento.
Los principales impulsos vinieron del comercio exterior y de la demanda interna, que compensaron la reducción en las inversiones.