Un seguro incluyente para los conductores chocolate

Un seguro incluyente para los conductores chocolate

De la misma forma que cualquier jugador deja en algún momento de ser “de chocolate”, recientemente en el sector automotriz los autos provenientes de Estados Unidos, que eran ingresados a territorio mexicano sin cumplir con la normativa de importación, han sido formalmente regulados por el gobierno.
Auto

Entre los requisitos necesarios para el registro de estos vehículos, la Organización Nacional de Protección al Patrimonio Familiar (ONAPPAFA) anunció que para legalizar los vehículos usados extranjeros es necesario pagar una cantidad de 2,500 pesos mexicanos y contar con identificación oficial, licencia de manejo, comprobante de domicilio, la baja del vehículo en EU (shipper export declaration), así como un seguro de autos con cobertura a terceros Esto significa una gran oportunidad para quienes han buscado hacerse de un automóvil pagando menos. Pero, si el objetivo es alcanzar un ahorro al comprar estos autos, ¿qué seguro es el que conviene?

La importación de autos es un fenómeno presente desde hace ya varios años. Previo a este registro los conductores debían de cumplir con una serie compleja de requisitos y documentación para la correcta legalización de su auto extranjero. Además de ello, importar un auto implicaba no solo gastar en su compra, sino pagar impuestos, aranceles y otros montos relacionados con diversos permisos dependiendo el tipo de vehículo, sin olvidar claro, el seguro correspondiente.

Lo anterior no solo propició que múltiples mexicanos optaran por introducir vehículos al país sin realizar el trámite correspondiente, sino que llegó a convertirse en un fenómeno de gran preocupación para la industria automotriz nacional. La presencia de los autos chocolate ha ido creciendo. Según Statista, durante el 2020 el número de vehículos usados importados a México superó las 124,000 unidades que suman al 9.34% de vehículos ilegales que comprende el total del parque vehicular nacional.

Si bien la regulación de estos vehículos desata controversias, una certeza es que parte del registro obliga a los compradores a asegurar sus vehículos usados de origen extranjero. Tomando en cuenta que dichos autos son adquiridos bajo una premisa de ahorro por parte de los compradores, resulta lógico ofrecerles un seguro que les permita mantener ese ahorro y al mismo tiempo cumplir con la normativa local.

“Regular los autos chocolate abre la posibilidad de que más conductores puedan transitar de forma segura” comentó Leonardo Cortina, CEO y cofundador de miituo.

“Anteriormente, gran parte de estos automovilistas no podían acceder a alguna clase de seguro debido a esta situación, lo cierto es que, ofrecerles una solución que se adapte a sus necesidades, sobre todo con relación al ahorro y uso, ayuda a que en general todos estemos protegidos al volante.”

Gran parte de los autos fronterizos se desplazan a otros estados de la república a través de puentes y carreteras federales para ser finalmente entregados a sus propietarios o llegar a su destino final. Teniendo en cuenta que por ley es necesario contar con un seguro para poder transitar estas vías y que anteriormente estos conductores no podían acceder a ninguna cobertura, en realidad, la regulación de estos autos chocolate se torna en una medida que ayuda a reducir la brecha de conductores no asegurados.

“Los conductores de autos chocolate, forman parte de una multiplicidad de personas al volante que requieren de un seguro todoterreno que se adapte a las diversas circunstancias no solo del camino, sino de su estilo de vida y metas financieras. Soluciones de pago por kilómetro coadyuvan a esta meta de ahorro que buscamos gran parte de los conductores. Quienes cuentan con un vehículo usado extranjero no tienen por qué quedarse fuera ni carecer de seguridad; la inclusión de todo tipo de conductor es una de las metas de las nuevas soluciones tecnológicas en el sector de los seguros”, concluyó Cortina.

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