Aunque la segunda generación del monovolumen llegará al mercado europeo en junio con dos motores V6 de tres litros cada uno, pronto habrá más propulsores de gasolina y diesel así como un plug-in híbrido.
El modelo base contará con un TDI de 272 caballos y un consumo de 5.7 litros con unas emisiones de CO2 de 149 g/km, así como con un TFSI de 333 caballos, 7.7 litros de consumo y emisiones de 179 g/km. Luego llegará un nuevo diesel de 218 caballos y 5.5 litros.
Aún más eficiente será el Q7 e-tron, que cuenta con un motor eléctrico que apoya al diesel V6. Juntos alcanzan 373 caballos y el consumo es de sólo 1.7 litros a los 100 km debido a una autonomía eléctrica de 56 km.
Audi también renueva las variantes más deportivas. El año que viene habrá un nuevo motor V8 de gasolina, así como por primera vez un modelo deportivo del Q7. Se desconoce aún si habrá una versión de 12 cilindros, pero sí parece descartado, al menos para el mercado europeo, un Q7 con cuatro cilindros, así como otro con tracción delantera.