"Decir que las condiciones de liberación bajo fianza de mi marido son crueles e inusuales sería un eufemismo. La Justicia japonesa no está alineada con los estándares de los otros países del G7", dijo en un comunicado difundido por sus representantes.
La esposa de Ghosn reclamó que Macron aproveche la cumbre del G7, que se celebra entre los próximos 24 y 26 de agosto en Biarritz, en el País Vasco francés, para abordar este tema con Abe.
Carole Ghosn le pidió concretamente que interceda para velar por que sus derechos sean respetados.
"Carlos merece un juicio justo, que empieza por unas condiciones de libertad bajo fianza justas y por el establecimiento de una fecha de juicio", añadió la esposa, a la que la Justicia nipona no le permite estar en contacto con el empresario brasileño.
A su juicio, las modalidades de esa libertad condicional "son de un rigor excesivo y abusivo y violan sus derecho fundamentales, principalmente debido a una vigilancia constante de sus movimientos y comunicaciones".
Carlos Ghosn fue detenido en noviembre en Japón por supuestas irregularidades fiscales. El estallido del escándalo hizo que el empresario, de 65 años, fuera cesado primero como presidente de las automovilísticas japonesas Nissan y de Mitsubishi, y posteriormente dimitiera como máximo ejecutivo del fabricante francés Renault.