¡Hola a todos!
Ya estamos de vuelta tras el Gran Premio de Gran Bretaña. Llegué a casa el lunes de madrugada, ya que tuvimos que tomar el vuelo a medianoche. La verdad es que prefiero poder aprovechar desde el primer día para descansar y empezar a preparar el siguiente Gran Premio, que será en San Marino.
A pesar de cómo acabó la carrera, el fin de semana nos fue bastante bien. Fuimos de menos a más en todas las sesiones de entrenamientos y me sentí muy cómodo. Después el sábado logré la pole, superando el récord de Silverstone en tres décimas.
Como ya dije en mi anterior entrada en el blog, el clima en el Reino Unido siempre da sorpresas, y para la carrera nos encontramos con unas condiciones muy complicadas. A pesar de ello me sentí muy cómodo sobre la moto y pude competir por la victoria.
Rodando con lluvia puede pasar de todo y casi sin darte cuenta puedes acabar en el suelo. Fue una pena finalizar de esa manera un fin de semana tan bueno, pero esto nos da más fuerzas para hacerlo mejor aún en la siguiente carrera, en Misano. También quiero aprovechar para dar las gracias a mi equipo, ya que gracias a su trabajo tuve una moto que funcionó de maravilla.
Entre sesión y sesión tuve una visita inesperada en el box. Freddie Spencer vino a visitarme y tuvimos una conversación muy interesante. La verdad es que es todo un placer poder compartir un rato con pilotos referentes como Fast Freddie.
Quiero acordarme en el post de esta semana de la reciente pérdida de un gran piloto como Joan Garriga. Desde aquí quiero dar todo mi apoyo a su familia y amigos más allegados.
Junto a otros miembros del Mundial aporté mi granito de arena en el evento Day of Champions, organizado por Riders for Health. Se hizo una subasta benéfica y doné unos guantes que utilicé en el GP de Argentina, además de firmar varios objetos ¡Incluso se subastó una preciosa guitarra eléctrica con los colores de Repsol y mi dorsal!
Además en Silverstone viví uno de esos momentos por los que vale la pena ser piloto de MotoGP; al salir de la rueda de prensa me topé con un niño que quería un autógrafo. El chaval, emocionado, se puso a llorar y a mi me salió darle un abrazo y un beso para calmarlo. Fue una sensación muy bonita, poder sentir la cercanía y el cariño que vosotros, los fans, nos mostráis constantemente. ¡Eso nos ayuda mucho a seguir adelante!
Muchas gracias a todos por vuestras muestras de ánimo. Ahora toca centrarnos en el próximo Gran Premio.
PD: Álex sigue así, poco a poco cada carrera vas mejorando. En Misano seguro que estarás delante, con el carrerón en Silverstone ya has demostrado que vas a más.