¿Por qué este compromiso con el IMSA?
Michelin y el IMSA han trabajado mano a mano durante los últimos doce meses, realizando numerosas pruebas y participado en un test colectivo oficial, conocido como “ROAR Before the Rolex 24”, celebrado a principios de año en el Circuito de Daytona. Allí, los equipos tuvieron la oportunidad de probar los neumáticos y conocer el nivel de apoyo por parte del equipo técnico. Michelin tendrá 37 ingenieros en Daytona, que se encargarán de dar asistencia técnica a los competidores, de recopilar datos, de mejorar el rendimiento de los neumáticos en la pista y de continuar con el desarrollo de los mismos.
Las 24 Horas de Daytona marcan el inicio de la unión de Michelin con el IMSA. A partir de este fin de semana, las cuatro clases que forman parte del campeonato –Daytona Prototype International (DPi), Le Mans Prototype 2 (LMP2), GT Le Mans (GTLM) y GT Daytona (GTD)– montarán neumáticos de la marca francesa. Así mismo, en Daytona también arranca el campeonato Michelin Pilot Challenge, donde los coches de las clases Grand Sport (GS) y Turismos (TCR) montarán neumáticos de altas prestaciones Michelin Pilot Sport GT S8M y S9M. Hace unas semanas, coincidiendo con el “Roar Before The Rolex 24”, se celebró la primera cita del tercer campeonato IMSA, en la que Michelin está presente: Prototype Challenge.
El plato fuerte del fin de semana, así como del campeonato, son las 24 Horas de Daytona. La carrera se celebra con esta duración desde 1966, aunque en 1962 y 1963 se disputó una prueba de tres horas y en 1964 y 1965 se disputó con 2,000 kilómetros de límite. Para ganar en cualquiera de las clases hace falta realizar una carrera perfecta, no cometer errores de conducción ni tener problemas mecánicos.
La clave, dicen los expertos, es mantener un ritmo consistente durante 23 horas para llegar al final en la vuelta del líder. Logrado este objetivo principal, llega el momento de atacar para remontar y luchar por la victoria. En esta pelea quiere estar una de las estrellas de las 24 Horas de Daytona 2019, el piloto español Fernando Alonso que, junto al equipo Wayne Taylor Racing y al volante de un prototipo DPi de Cadillac, busca lograr el triunfo en otra de las grandes carreras del automovilismo. El pasado mes de junio, sin ir más lejos, Alonso logró –con Toyota y equipando neumáticos MICHELIN en su prototipo– el triunfo en las 24 Horas de Le Mans. Entre sus compañeros se encuentran los experimentados Jordan Taylor, Renger Van der Zande y el también ex piloto de F1 Kamui Kobayashi.
A ellos se unen otros famosos nombres como Rubens Barrichello, Hélio Castroneves, Juan Pablo Montoya, Scott Dixon, Alexander Rossi, Simon Pagenaud, Nick Tandy, Earl Bamber o el italiano Alessandro Zanardi, que perdió las dos piernas tras un accidente en la CART en 2001, y que compite en esta dura carrera con un BMW M8 GTE adaptado. A todos ellos hay que sumar la presencia española de Antonio García, que ya sabe lo que es ganar en Daytona, con un Chevrolet Corvette en la clase GTLM; Miguel Molina con un Ferrari 488 GTE también participa en GTLM y Alex Riberas con un Audi R8 LMS GT3 lo hace en GTD.