Muestra de esto es la Formula Renault, que ofrece oportunidad a las mujeres de ser parte del deporte motor mientras compiten por entrar a “la máxima categoría del automovilismo”, ya que esta prueba es una de las antesalas a la Fórmula Uno y se compite con monoplazas de 2 litros.
Después de que a principios de este año Bernie Ecclestone, director ejecutivo de la Fórmula Uno, declarara que no tomaría en serio a ninguna mujer que quisiera participar en un Gran Premio, y que Clarie Williams, jefa de equipo adjunta de Williams Martini Racing, comentará el año pasado que ella quiere ser un ejemplo para muchas mujeres en el deporte motor y acercar a más mujeres a este deporte, se desató la discusión sobre si las mujeres debían ser consideradas como pilotos titulares de las escuderías de Fórmula Uno, pero el equipo de Renault Fórmula Uno ha dejado clara su postura, sumando a mujeres en sus categorías del deporte motor, debido a su talento y pasión que no respeta género.
Ejemplo de esto es Carmen Jordá, piloto de pruebas de Renault Fórmula Uno, quien realizó gran parte de su carrera en Fórmula Renault, siendo su objetivo poder correr por las pistas del Gran Premio. "En todos los sectores, la mujer está tomando ahora un puesto diferente. En la F1, hace veinte años no había ninguna mujer y ahora ya somos dos", comentó Carmen Jordá al dar a conocer su estancia con Renault este año.
Susie Wolff, es otra piloto de prueba que llegó a formar parte de un equipo de Fórmula Uno. Quien ha corrido en distintas categorías, pero destacan sus inicios en la Fórmula Renault de Inglaterra, donde ganó tres podios y fue dos veces nominada al premio como la mejor piloto del año en Reino Unido. Wolff estuvo como piloto de desarrollo y de pruebas en Fórmula Uno y este año abandonó su puesto para lanzar una iniciativa junto a la Asociación del Deporte Motor del Reino Unido llamada “Atrévete a ser diferente”, con el objetivo de inspirar e impulsar el talento femenino, para que en un largo plazo las niñas puedan ser pilotos titulares de una escudería.
En 2011, María de Villota convenció a Bernie Ecclestone, director ejecutivo de la Fórmula Uno, para conseguir una prueba con el equipo de Renault Fórmula Uno. La prepararon física y mentalmente; el entrenamiento incluía desde simulador hasta rodar en GP2. Finalmente, el 3 de agosto del mismo año, formó parte de la prueba en el monoplaza de Renault R29 en el circuito de Paul Ricard. María fue la alumna perfecta y gracias a su desempeño en la prueba, María firmó con Lotus Renault GP como piloto oficial de reserva. "La F1 es la cima del automovilismo y siempre ha sido un sueño para mí", mencionó María de Villota saliendo de la prueba en el Paul Ricard.
Desde que somos pequeños nos han enseñado a relacionar los autos con el género masculino, y el deporte motor no es la excepción. Cuando pensamos en Fórmula Uno rara vez lo relacionamos con el género femenino, la historia está basada en hombres y es ahí donde se ponen los reflectores. Las mujeres también son parte del Gran Premio, y en la historia de la Fórmula Uno cinco han sido pilotos titulares, y algunas de ellas compitieron en la Fórmula Renault, donde comenzaron a abrirse camino y ganar posiciones para escribir su propia historia en el deporte del motor.